Por Agroempresario.com
Se conoció una importante modificación en las condiciones que debían cumplir las empresas para adherirse al programa de incentivos para inversiones del gobierno. La limitación a vehículos nuevos ya no será una condición, permitiendo la producción de modelos híbridos de versiones existentes en el mercado.
Con la publicación del Decreto 1028 en el Boletín Oficial, el Gobierno amplió el alcance del Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) a proyectos preexistentes que no habían sido incluidos en este régimen. Esta modificación tendrá un impacto significativo en la industria automotriz, ya que permitirá que modelos híbridos de vehículos que ya se producen en Argentina puedan acceder a los beneficios del programa, lo que antes no era posible.
Históricamente, solo los vehículos con nuevas motorizaciones, como los eléctricos e híbridos, podían beneficiarse de estos incentivos. Sin embargo, la anterior normativa exigía que los vehículos fueran completamente nuevos, es decir, que no se produjeran previamente en el país. Este obstáculo afectaba a modelos como las pick-ups medianas Toyota Hilux y Ford Ranger, que, al ser vehículos ya fabricados en Argentina, no podían incorporar versiones híbridas bajo el marco del RIGI. Ahora, con la nueva reglamentación, se permitirá que estos modelos adapten su motorización a tecnología híbrida y se acojan a los incentivos gubernamentales.
La modificación también abre la puerta para que otras marcas que fabrican vehículos en el país, como Volkswagen, Fiat, Peugeot, Chevrolet, y Renault, puedan introducir versiones híbridas de modelos ya existentes, como la Amarok, Taos, Cronos, Tracker, Frontier/Renault Alaskan y Kangoo. Además, la posibilidad de producir versiones híbridas de la Toyota Hilux, que se encuentra en desarrollo en formato de concepto eléctrico, se ve cada vez más cerca de convertirse en una realidad con los beneficios del RIGI.
El caso de la pick-up Renault Niágara Concept, cuyo lanzamiento está previsto para 2026, ilustra cómo los proyectos con nuevas plataformas que ya admiten la hibridación se beneficiarán de la modificación. Aunque inicialmente Renault había planeado un modelo con motorización a combustión interna, la nueva normativa permite que la versión híbrida también sea incluida en el RIGI, garantizando incentivos para su desarrollo.
Según el nuevo texto, se aclara que los proyectos de ampliación de modelos preexistentes pueden calificarse como nuevos proyectos bajo el RIGI, incluso si comparten la infraestructura de producción con modelos no híbridos. Esta medida aporta claridad a la industria, permitiendo a los fabricantes de automóviles continuar sus proyectos con un marco legal más seguro.
Uno de los puntos clave de la modificación es que se permite la utilización compartida de la infraestructura y los activos entre diferentes proyectos, lo que brinda mayor flexibilidad a las automotrices para adaptarse a las nuevas tecnologías sin tener que crear una nueva empresa o cambiar la estructura existente. Aunque este cambio se puede ver como un reto administrativo, no representa un obstáculo técnico, ya que la práctica de dividir empresas por tecnologías, como lo hacen Ford y Renault en otras partes del mundo, es común en la industria automotriz global.
Con estos cambios, las terminales automotrices tendrán la posibilidad de avanzar con sus planes de electrificación e hibridación sin las limitaciones previas, lo que contribuirá a la expansión de vehículos más sostenibles en el mercado argentino.