Esta medida, vigente hasta el 28 de febrero de 2025, forma parte de las estrategias anuales de control y manejo del fuego, diseñadas para proteger nuestros valiosos ecosistemas.
El objetivo principal de esta prohibición es prevenir incendios forestales durante la temporada primavera-verano, especialmente en un contexto de temperaturas elevadas. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la primavera de 2024 en Argentina registró una anomalía de temperatura de casi 1,5 °C, superando los récords de los últimos 50 años. En Entre Ríos, la anomalía alcanzó 1,5 °C, superando el récord histórico de 2014.
Esta iniciativa se fundamenta en la Ley Provincial Nº 9.868 de Manejo del Fuego. La secretaria de Ambiente, Rosa Hojman, enfatiza que "la protección del ambiente es un compromiso compartido por todos. Es esencial implementar medidas preventivas para evitar incendios que puedan devastar nuestros bosques y dañar la biodiversidad de nuestros ecosistemas, especialmente en este contexto de calentamiento global crítico y persistente".
Quienes incumplan con esta prohibición estarán sujetos a multas y denuncias judiciales, conforme a la legislación provincial vigente.