xportaciones de granos con menos dólares. Por segundo año consecutivo, las estimaciones para la campaña agrícola 2020/2021 no son buenas. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) advierte una mala cosecha, con una caída del 3% en el ingreso de divisas al país. La entidad proyecta un aporte de US$25.156 millones por las ventas al exterior de los productos de los principales cultivos para grano comercial.
En un seminario donde los técnicos de la entidad presentaron sus proyecciones, apuntaron a un conjunto de factores que influyen en la campaña, entre ellos: la sequía; el estancamiento, debido a la mayor carga impositiva sobre el sector; un marco influido por el coronavirus; las tensiones entre China y los Estados Unidos; y la peste porcina africana, con fuerte impacto sobre el mercado.
Respecto a los datos de las superficies sembradas, las cifras tampoco son alentadoras: la superficie sembrada total, considerando los seis principales cultivos –soja, maíz, trigo, girasol, cebada y sorgo–, caerá un 1,2%, en tanto que la cosecha se recortará un 6,1%. “En el caso de la siembra total, se implantaron 33,63 millones de hectáreas en 2018/2019, se pasó a 33,55 millones de hectáreas en 2019/2020 y ahora se caerá otro escalón, a 33,15 millones de hectáreas”, indicó Esteban Copati, jefe de estimaciones de la entidad.
En cuanto a la cosecha, se espera el mismo recorrido bajista: 120,8 millones de toneladas contra las 128,7 millones de toneladas de la campaña 2019/2020.
A ello se le suma que la producción agrícola entró en una suerte de estancamiento. Esto puede dimensionarse a través del Producto Bruto Agrícola (PBA) de las cadenas agrícolas, que cayó un 5,7% en el último ciclo agrícola y descendería un 0,2% para la campaña 2020/2021.
En cuanto a las producciones esperadas, el trigo aguarda una cosecha de 17,5 millones de toneladas, con una merma del 6,9% en comparación al ciclo agrícola anterior; en cebada se proyectan 3,7 millones de toneladas, un 5,7% más; en maíz, 47 millones de toneladas, con un 8,7% de caída; en soja se esperan 46,5 millones de toneladas, con una retracción del 5,1%; en girasol, 3,1 millones de toneladas, con una baja del 8,8%; y en sorgo, tres millones de toneladas, evidenciando una mejora del 20%.