Salta será la tercera provincia del país en incorporar el esquema de exportaciones simplificadas, luego de que el gobernador Gustavo Sáenz acordara este jueves en la Casa Rosada los lineamientos para que empresas locales ingresen al régimen de Exportación en planta, una modalidad que permitirá realizar controles aduaneros mediante monitoreo remoto. El anuncio es relevante porque apunta a acelerar los tiempos operativos, reducir costos y facilitar la inserción internacional de la producción provincial.
El encuentro se desarrolló en la sede del Poder Ejecutivo nacional y reunió al jefe de Gabinete Manuel Adorni, al ministro del Interior Diego Santilli y al director ejecutivo de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), Juan Pazo, quienes presentaron al mandatario salteño los alcances del nuevo sistema. La medida forma parte de las acciones impulsadas por el Gobierno nacional para simplificar el comercio exterior y generar condiciones más competitivas para las economías regionales.
De acuerdo con la información oficial, el entendimiento permitirá que las compañías radicadas en Salta puedan despachar mercadería directamente desde sus plantas industriales o establecimientos productivos, sin necesidad de trasladarla previamente a una aduana física. El control será efectuado mediante un sistema de videovigilancia (CCTV), lo que habilita una fiscalización remota y en tiempo real por parte de la autoridad aduanera, garantizando trazabilidad y cumplimiento normativo.
La implementación provincial del régimen representa un paso significativo para la cadena exportadora local, especialmente para sectores que enfrentan altos costos logísticos por la distancia a los principales puertos del país. Según destacaron fuentes oficiales, el objetivo es reducir los tiempos muertos de espera, optimizar el uso de recursos y favorecer una mayor previsibilidad operativa para las firmas que proyectan expandir su participación en mercados internacionales.
Durante la reunión, Sáenz subrayó la necesidad de avanzar en políticas públicas que fortalezcan la producción del norte argentino y generen oportunidades concretas para la creación de empleo privado. El mandatario consideró que el nuevo esquema de control constituye una herramienta clave para modernizar los procedimientos de exportación y dotar de mayor eficiencia a los procesos aduaneros. “Defender a Salta es abrir nuevas oportunidades para nuestra economía, acompañar a quienes generan trabajo y fortalecer la competitividad de todo el norte argentino”, expresó el gobernador en diálogo con las autoridades nacionales.

El régimen de Exportación en planta ya se encuentra vigente en otras jurisdicciones del país y ha sido valorado por empresas que buscan minimizar el impacto de los costos logísticos en su estructura operativa. Con la incorporación de Salta, el Gobierno nacional apunta a consolidar un modelo más federal para la facilitación del comercio, orientado a reducir barreras administrativas y estimular el crecimiento productivo de las provincias. Funcionarios de la Nación remarcaron que esta política se enmarca en un programa integral destinado a “promover el comercio exterior y la actividad privada con menos trabas y menos costos”.
Participaron además del encuentro el ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Trabajo de Salta, Ricardo Villada, y representantes del Consorcio de la Zona Franca de Salta, integrado por las empresas La Moraleja S.A., Austin Powder Argentina S.A. y Coprotabaco Ltda.. Estas firmas, que poseen una trayectoria exportadora relevante en sectores como el agro, la industria química y la producción tabacalera, forman parte del conjunto de actores que potencialmente podrán beneficiarse con el nuevo sistema.
Según detallaron voceros provinciales, la aplicación del régimen permitirá avanzar en la digitalización y simplificación de procedimientos, una demanda histórica del sector privado exportador. Para las empresas que operan en zonas alejadas de los nodos logísticos tradicionales, la posibilidad de cargar y despachar mercadería desde su propio predio implica mejoras sustanciales en planificación, costos y eficiencia. Además, la fiscalización remota mediante cámaras y protocolos aduaneros ya estandarizados contribuye a un proceso más ágil sin resignar controles.
En términos macroeconómicos, la medida puede aportar a una mayor diversificación de las exportaciones salteñas, al facilitar la ampliación de operaciones en mercados de alto valor agregado. La provincia ha buscado en los últimos años consolidarse como un actor relevante en rubros como la agroindustria, la minería, la industria química y la economía del conocimiento, sectores con potencial de crecimiento y fuerte demanda internacional.
El Gobierno provincial resaltó que la adopción del esquema de exportación simplificada se complementa con otras iniciativas orientadas a atraer inversiones y promover el desarrollo productivo. Entre ellas, se mencionan los avances en infraestructura logística, la expansión de parques industriales, acuerdos con cámaras empresarias y programas de capacitación para mejorar la competitividad laboral. La articulación con Nación para incorporar el control aduanero remoto se inscribe en esa estrategia integral.
En la Casa Rosada remarcaron, además, que el trabajo conjunto entre jurisdicciones responde a la decisión de construir consensos para la implementación de políticas federales que favorezcan a las provincias. En ese sentido, Santilli y Pazo destacaron la necesidad de “modernizar los procesos de control sin generar mayores cargas para los exportadores”, una línea de acción que —según afirmaron— continuará ampliándose hacia otras regiones del país.
La provincia de Salta posee una marcada vocación exportadora, con una matriz productiva diversificada que incluye bienes primarios, manufacturas de origen agropecuario, químicos, minerales y productos industriales. La posibilidad de acceder al régimen de control en planta se presenta como una oportunidad para empresas de distinto tamaño, desde grandes compañías hasta pymes con potencial exportador, que podrán agilizar trámites y expandir capacidades sin que los costos logísticos representen una barrera determinante.
Con la definición técnica y administrativa acordada entre Nación y Provincia, ahora comenzará la etapa de adecuación operativa, que incluirá la instalación de equipamiento tecnológico, capacitación del personal involucrado y ajustes en los procedimientos internos de las empresas interesadas. Una vez puesto en marcha, el sistema permitirá a las firmas salteñas competir en mejores condiciones en el mercado global, al reducir tiempos de salida y garantizar un control eficiente, digital y ajustado a las nuevas normativas de comercio exterior.
La decisión constituye, en definitiva, un avance para la región en términos de competitividad y modernización productiva. Al sumarse al régimen de exportación en planta, Salta consolida su estrategia de fortalecimiento económico y se integra a un modelo de comercio exterior más ágil, moderno y adaptado a las demandas actuales. Para las autoridades provinciales, el acuerdo refleja un paso firme hacia un esquema de desarrollo que prioriza la generación de empleo, la innovación y la apertura de nuevos mercados, según destacó la Secretaría de Prensa y Comunicación.