Arquitectura inteligente: nuevas formas de construir

a firma C.A.U.H. –cuyas siglas provienen de Creativo, Auténtico, Útil y Humano– construye viviendas sustentables y customizadas. De la mano del arquitecto Ignacio Mussi Tiscornia, la empresa ofrece un catálogo de casas personalizadas y sustentables que son un 20% más baratas que las construidas con ladrillo.

Ignacio Tiscornia siempre estuvo interesado en la problemática del déficit habitacional y el acceso a la primera vivienda. Con esta motivación, decidió crear C.A.U.H junto a su hermano Santiago, Chief Design Officer, y a sus amigos Mariano Molina, Chief Technical Officer, y Andrew Pringle Sattui, Parametric Officer de la empresa.

El sistema de construcción que aplican es híbrida, mitad fabricación digital y mitad construcción en madera. “Las articulaciones –lo que une los tirantes verticales, diagonales y horizontales– se hacen a través de fabricación digital; es decir, cortes con control numérico computarizado (CNC) en 2D. De esta manera, mejoramos el sistema al combinarlo con la construcción en madera con lo cual es más económico“, explica Tiscornia.

A través de su página web ofrecen cuatro tipos de diseños genéricos de casas: la norteña, la mesopotámica, la pampeana y la patagónica. Por ese medio, se puede acceder a diferentes modalidades de adquisición: los planos, los planos más materiales, o los planos, los materiales y la dirección de obra.

C.A.U.H se encuentra articulando una red de profesionales que le permita ofrecer propuestas a contratistas locales. La firma lleva realizadas seis casas: una en Bariloche, dos en Pilar (en construcción), una en Corrientes, otra en Vicente López y una en la Ciudad de Buenos Aires.

La facturación estimada en ventas para el  2020 es de US$281.000.

Los costos de la sustentabilidad

A partir de esta propuesta, los planos de una casa pueden costar seis veces menos que si se contrata un estudio de arquitectura y, si se construye, los valores son los mismos que en la construcción en seco, es decir, un 20% menos que la construcción con ladrillos. “Si bien la construcción en seco representa un porcentaje muy chico de todo lo que se construye en el país, hace más de 10 años que crece y sabemos que en el futuro va a ser más importante, porque es un 20% más barata, un 50% más rápida y más ecológica”, asegura el arquitecto.

En el caso de la construcción en madera, no se tala, sino que el insumo que se utiliza es de reforestación. En este sentido, producir de esta forma implica plantar mucho más de lo que se saca.

Para la modalidad de construcción obra gris, hay que calcular entre US$550 y US$650 el metro cuadrado, mientras que para la etapa de llave en mano son alrededor de US$750 por metro cuadrado.

Enfoque social y responsabilidad empresaria

Los clientes más interesados en su sistema de construcción son personas que buscan una casa de fin de semana y otras que proyectan su primera vivienda.

Teniendo en cuenta la problemática habitacional y de acceso a la vivienda, la empresa trabaja con la organización sin fines de lucro TECHO. El objetivo es ofrecer un kit para construir viviendas desde la fábrica social. “Tenemos una máquina CNC que usa TECHO y la idea es que se convierta en una fábrica de kits que puedan entregarse a contratistas para la construcción de viviendas más económicas. Una vivienda social no debería ser distinta de una definitiva”, concluye Tiscornia.