Desarrollo Económico & Social / Grupos de Productores Cambio Rural

Norma Bessone, una mujer comprometida con la docencia y el campo

Por primera vez una mujer productora presidirá la Sociedad Rural de Rafaela

Norma Bessone, una mujer comprometida con la docencia y el campo
lunes 13 de abril de 2020
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orma Bessone asumió como nueva titular de la gremial agropecuaria, que en sus 113 años de historia siempre tuvo a hombres comandando sus destinos.

El rol de la mujer en el agro empieza a acelerarse a punto tal que varias instituciones sienten la necesidad de ampliar su base del conocimiento dándole un lugar privilegiado en sus filas. Un caso emblemático es el de Norma Bessone, docente y productora de la localidad santafesina de Rafaela.

Bessone fue elegida como flamante presidenta en la última asamblea llevada a cabo por la Sociedad Rural de Rafaela (SRR), entidad que se encuentra adherida a Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

“Tengo muchos desafíos por delante, mi asunción coincide con un momento muy duro del país. Sin embargo, entendemos que debemos avanzar en un sistema productivo sustentable que nos permita crecer como país y donde la mujer debe ocupar un rol preponderante”, explicó.

“En la SRR tuve las respuestas que necesitaba para tomar las mejores decisiones”, dice Norma Bessone.

Bessone, tuvo una destacada labor como directora fundadora de la Escuela de la Plaza, en Rafaela, un proyecto educativo gestado en la década del 90.

Su incursión en la ruralidad tuvo lugar a partir del año 2005, cuando ingresó a la entidad como impulsora y articuladora del Grupo de Ayuda de Mujeres Agropecuarias (GAMA).

En este “gremio” sus integrantes llevan a cabo un fecundo trabajo y aporte desde la mirada femenina y son activas participantes de las actividades sociales y gremiales que lleva adelante la institución.

Además, llegó a ser secretaria de Educación de la Municipalidad de Rafaela durante el año 2008, en la gestión de Omar Perotti como intendente, pero las tensiones políticas dadas por cuestiones como la Resolución 125 –tan cuestionadas en aquella época por miembros de la Rural, de la que Norma era parte- hicieron que prevaleciera la moral y decidió renunciar a ese cargo “con profundo dolor” dijo, ya que dejó truncos varios proyectos en el área educativa.

¿Cree que esta designación al frente de la Rural es un paso trascendental en su vida?

Sí, fue una decisión que me llena de responsabilidad. Venía desempeñándome como secretaria de la entidad, pero surgió esta posibilidad de que, por primera vez en 113 años de historia, la SRR fuera presidida por una mujer.

La asamblea me dio los avales para hacerlo y hoy siento el profundo desafío de trabajar para el campo pero también para la sociedad de Rafaela. Sin dudas que como mujer siento que la responsabilidad es mayor y con ganas la voy a afrontar.

¿Siente que algo cambió en la entidad para que eligieran a una mujer para dirigir sus destinos? 

Sinceramente, no. En los años que me tocó compartir con el grupo GAMA observé un profundo respeto de todos los integrantes de la institución, ya sea comisión directiva y socios en general por la vocación de servicio de todas las mujeres que participan de esta organización.

De hecho, tuve un apoyo que me enorgullece, no solo a mí, también a todas las mujeres que integran la SRR. Esta entidad siempre defendió el rol de la mujer en sus filas.


El apoyo de la familia en primer lugar 

“Quienes desempeñamos una vida asignada al trabajo social o institucional, sabemos que los que más sufren postergaciones son nuestras familias”, expresó con emoción la primera mujer presidenta de la entidad.

En ese sentido, recordó que se trata de una actividad que se hace ad honórem e insume mucho tiempo de dedicación. “Mis nietos son los que más reclaman mi presencia”, asegura con una sonrisa la entrevistada.

Norma fue siempre docente pero nació en el seno de una familia agropecuaria y tambera. “Toda mi vida oía hablar a mis padres sobre el problema del precio de la leche y hoy vivo en carne propia el mismo reclamo de miles de tamberos”, asegura la ruralista, dejando en claro los desafíos que tiene el Estado hacia las políticas agropecuarias.

Hace algunos años, Norma Bessone perdió a su esposo, a su padre y luego a su hermano, en poco tiempo y tuvo que asumir las responsabilidades del campo, con la valentía que solo una mujer lo puede hacer, renunciando a su actividad docente.

“Siempre se sufren cachetazos en la vida, pero hay que determinarse una cuestión clave: o dejás que esos cachetazos te aplasten o le ponés fuerzas y salís adelante”, expresó con absoluta sabiduría la entrevistada.

“La Sociedad Rural me formó”, dice Norma Bessone

Paradójicamente, Bessone pasó de ser formadora a iniciar su vida de formación dentro de la Sociedad Rural. “En este lugar tuve las respuestas que necesitaba para tomar las mejores decisiones en los negocios familiares que ahora estaban a mi cargo”, explicó.

-¿Cuál es su sentimiento para con esta entidad agropecuario que tantos años brindó apoyo a los productores?

-Sinceramente, en lo personal le debo muchísimo a esta entidad y a su gente de trabajo. Es una institución muy importante no solo para el campo sino también para la sociedad de Rafaela en su conjunto.

-¿Cómo observa la situación en la actualidad?

–Nos encontramos con un nuevo conflicto campo-Gobierno, que si bien esperábamos un aumento en las retenciones, nunca imaginábamos que fuera de esta manera, tan inconsulta e indeseable.

El sector pasó de diferentes estados de ánimo, de estar muy enojados a una enorme preocupación. Cuando el Presidente asumió, estuve muy atenta a su mensaje conciliador. Lamentablemente luego fue todo lo contrario y eso nos resulta llamativo.

-¿Cree que  con el incremento de retenciones el Gobierno impulsa algunas mejoras en las políticas agropecuarias?

–No lo creo. Lo que busca es hacer caja, simplemente. Hay muchas cosas por mejorar, entre ellas red de caminos rurales, logística e infraestructura, mayor acceso al crédito, mejores tasas, cosas que no creo estén en carpeta del Ejecutivo, lamentablemente.

(El Presidente) Alberto Fernández debe entender que no todo es asistencialismo: estamos de acuerdo en que hay que atender la urgencia de los que menos tienen, pero no la adhesión a una política sin sustento que produce déficit fiscal.

-¿Qué desafíos tiene por delante como mujer dentro de la entidad?

– Hay muchos aspectos que deseamos mejorar y otros que creemos que institucionalmente deben continuar. El rol de la mujer en la Sociedad Rural es algo que intentaremos profundizar en nuestra gestión, reconociendo que es un aspecto que se viene manejando con muy buena predisposición desde hace tiempo.

También, instalar a la juventud como un sector dinámico y de suma importancia dentro de agro rafaelino y discutir políticas agropecuarias con el sector público para fomentar el crecimiento de las distintas variables en agricultura, lechería y ganadería.

Debemos abrir cada vez más nuestras puertas a la sociedad para que juntos podamos discutir temas como medioambiente, educación agraria, seguridad, entre otros aspectos.

Abc rural

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