Los incendios y la sequía amenazan la próxima cosecha de caña de azúcar en SP

A

unque el potencial productivo todavía depende de las lluvias de verano, el riesgo de una mala cosecha ha entrado en el radar y ya está contribuyendo a la subida del azúcar en la Bolsa de Nueva York.

A principios de mes, el interior de São Paulo fue testigo de temperaturas superiores a los 40ºC. En regiones al norte del río Tietê, como Ribeirão Preto y São José do Rio Preto, las lluvias para la cosecha 2020/21 son 70% menores que el promedio histórico, según información del Sistema Tempocampo recientemente difundida por la Unión de Industrias de Cana-de. Azúcar (Único). Hay regiones con más de 100 días sin lluvias importantes.

Para empeorar las cosas, el clima más cálido y seco está facilitando los incendios. En septiembre, los focos de incendios en el estado de São Paulo superaron los 2.200 y superaron la serie histórica del mes. Hasta ayer, los brotes han dejado atrás la media histórica de octubre, con 936 registros, según datos del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe).

Los incendios en áreas ya cosechadas esta temporada obstaculizan el crecimiento y el crecimiento de la caña de azúcar en la próxima zafra, señala Antonio de Padua Rodrigues, director técnico de Unica. En los casos en que los incendios ocurrieron en cultivos que aún no habían sido cosechados, los ingenios anticiparon el trabajo para evitar que la caña se pudriera en el campo.

El incendio provoca retrasos en el desarrollo de la caña de azúcar y falta de brotación, dice Plinio Nastari, presidente de la consultora Datagro. Este retraso para la próxima zafra, dice, refuerza la indicación de que la temporada baja en el Centro-Sur se extenderá por más tiempo, lo que mantiene los contratos de azúcar demerara en la Bolsa de Nueva York para marzo de 2021 con precios por encima del nivel del papel. para mayo. Ayer, marzo cerró a 14,21 centavos la libra, 62 puntos por encima del nivel de principios de mes y 49 puntos más que los contratos de mayo.

Para el resultado de la cosecha actual, el impacto debe ser compensado por la alta productividad de los dos primeros tercios de la cosecha y la alta sacarosa en la caña (ATR). Recientemente, la consultora StoneX elevó la estimación de trituración de caña de azúcar de la actual zafra a 597,8 millones de toneladas, pero pronosticó una reducción del 1,2% en el volumen del próximo ciclo debido al clima.

Unica está calculando los impactos de la sequía y los incendios, y Padua señala que es demasiado pronto para hacer una estimación para la próxima cosecha, ya que los campos de caña tienen su período de crecimiento más importante desde ahora hasta marzo.

Ejecutivos comentan, sin embargo, que como muchas plantas han aumentado el área de renovación de cultivos luego de la buena rentabilidad de la pasada cosecha, hay una mayor extensión con nuevas plantas (“planta de caña”), las cuales son más afectadas por el fuego que las áreas con caña rebrote ("caña soca").

En Usina Alta Mogiana, los incendios alcanzaron 10,000 de las 75,000 hectáreas de cañaverales. Para minimizar los efectos, la empresa está llevando a cabo riego de rescate con vinaza, dice Luiz Gustavo Junqueira, director comercial de la empresa. En Usina Batatais, los incendios alcanzaron el 2% de los cultivos. En estas áreas, la empresa debe rehacer acuerdos culturales, dice Luiz Gustavo Diniz, director de la empresa.

Somar Meteorologia predice que la primavera estará por debajo del promedio en el sureste, dada La Niña, dice la meteoróloga Fabiene Casamento. En verano, las lluvias deberían volver a la normalidad, con un paréntesis en febrero, cuando deberían volver a disminuir. Pero Nastari recuerda que más importante que el volumen es la distribución de las lluvias, que mantiene abierto el escenario.

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