Patagonia argentina: tierra de glaciares y pasiajes legendarios

Conocida por sus grandes montañas, majestuosos glaciares y lagos de aguas celestes, la Patagonia austral –que se extiende a lo largo de Argentina y Chile- es una de las regiones sudamericanas más visitadas por turistas internacionales. La belleza de sus paisajes y el encanto de su geografía hace que visitantes de todas partes del mundo se dirijan hacia el famoso “Fin del Mundo” en busca de nuevas aventuras.

Tanto en la Argentina como en Chile, hay parques nacionales aptos para todo público, a los que se puede acceder para escalar montañas cubiertas de nieve o recorrer bosques antiguos. Por otra parte, los más osados tienen la opción de hacer trekking sobre los imponentes glaciares y vivir una experiencia irrepetible.

El Parque Nacional Los Glaciares es el sitio más emblemático del Lago Argentino, debido a historia que atesora, y la gran cantidad de actividades que ofrece. Lo más conveniente es visitar la zona entre septiembre y marzo, ya que las temperaturas en épocas invernales suelen ser muy bajas. Además, se recomienda usar varias capas de ropa, campera impermeable, calzado que sirva para realizar largas caminatas y lentes de sol. Como durante las excursiones las paradas pueden ser esporádicas, lo mejor es llevar una mochila con productos para abastecerse.

El Glaciar Perito Moreno, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 1981, recibe alrededor de cien mil visitas por año. Ubicado cerca de El Calafate, representa uno de los capos de hielo más impresionantes del mundo, de modo que para admirarlo de cerca se ofrecen cruceros en barco por el Lago Argentino, donde se puede presenciar el atractivo desprendimiento de los bloques.

Además, los tours Big Ice y Mini-trekking permiten que los turistas tengan la oportunidad de caminar por encima del glaciar, usando un calzado especial compuesto por crampones de metal. De todas maneras, para realizar estas actividades se requiere de un excelente estado físico.  

Para adquirir una visión real de la vida de los habitantes locales, es recomendable realizar tours por distintas estancias históricas. La Estancia Cristina, de más de un siglo de antigüedad, por ejemplo, es un establecimiento que trabaja los 365 días del año, que cuenta con un bellísimo paisaje, ideal para caminar o cabalgar con los glaciares de fondo.

A poco más de tres horas al norte de El Calafate, está el pueblo de El Chaltén, donde se destaca el Cerro Fitz Roy. La ciudad está repleta de pequeños y pintorescos chalets y una red de senderos turísticos con impresionables vistas.

Ya en Tierra del Fuego, el viaje consiste en un recorrido por el “fin del mundo”, donde es posible disfrutar de cruceros o catamaranes que hacen paradas para observar y tomar fotografías de los pingüinos y lobos marinos que habitan el legendario canal de Beagle.

Además de hacer un alto en la capital de la provincia, Ushuaia, se aconseja pasar por el Parque Nacional Tierra del Fuego, donde habita una exuberante selva tropical subantártica sombreada por hayas. Asimismo, el Glaciar Martial es otro buen punto de interés, ya que allí se puede obtener la mejor vista panorámica de la zona. Por otra parte, los amantes de la pesca pueden realizar peregrinaciones por las orillas del Río Bravo, con la esperanza de pescar algún ejemplar de trucha marrón.