arolina Sanchis es la creadora y artesana detrás de Carolita Home, una marca de productos deco con detalles en telar que desde 2017 marca tendencia con sus diseños bohemios y rurales.
Carolina creció rodeada de tejidos, comida casera y paisajes rurales del campo. Esas experiencias constantes en su vida la acompañaron incluso hasta la universidad, donde su tesis sobre la simbiosis entre el telar del norte argentino y la noche porteña le valió el diploma de Diseño de Indumentaria y Textil en la Universidad de Buenos Aires. Después de culminar sus estudios, se tomó un mes para viajar. Al regresar al país, comenzó rápidamente a buscar trabajo para recuperar sus ahorros. Fue en ese momento que retomó el instrumento de su tesis.
“Como me había quedado con ganas de seguir haciendo telar, empecé a hacer encargos a amigos, conocidos, familiares y a mostrar cómo lo hacía. Abrí un nuevo perfil de Instagram como un hobby, para no molestar a nadie y que me siguiera el que le interesara”, relata Carolina. Hoy, esos seguidores superan los 45 mil y sus manos casi no dan abasto.
Durante el primer año, Carolina invirtió tiempo y dinero en estudiar qué estilo le gustaba, pensar qué rumbo le daría a su emprendimiento y cuál sería su identidad. Con mucho esfuerzo y paciencia, presentó a Carolita Home como una marca de diseño de objetos y accesorios artesanales, atemporales y con detalles en telar, una técnica antigua y tradicional que ella moderniza creando un universo textil contemporáneo.
“Amo todo lo que sea tacto y todo lo que lleva el telar: paciencia, constancia y desconexión del mundo”, detalla. Según afirma, su inspiración es infinita: “La bohemia Argentina, la parte vibrante de la Argentina rural, los paisajes nacionales, lo rústico del campo, la cultura gauchesca”.
Los materiales que utiliza son autóctonos e incluyen hilo y cordón de algodón, y algunas lanas como el vellón y el cordón de lana. Las formas, las texturas y los colores que sus manos mezclan en el telar buscan “rescatar el sentido de la nostalgia, la belleza y la libertad a través de los objetos”, como tapices, carteras, fundas de almohadones, sandalias, alfombras, cinturones y más.
Todo, absolutamente todo, está hecho a mano. Los tapices se realizan por encargo y mediante el intercambio que tiene con sus clientes. Juntos deciden los colores y la trama, para que el producto final sea la materialización de una idea personal e irrepetible. Cada tapiz grande le lleva dos semanas, un proceso que registra con fotos y videos que envía al cliente y que, a veces, comparte en sus redes.
El detalle de la fotografía y la estética coherente de su feed es un placer visual que incita a seguir admirando su trabajo, una característica que Carolina insiste en remarcar como clave a la hora de destacar una marca.
Tal fue el éxito de Carolita Home que la diseñadora organizó workshops para enseñar el oficio. Hoy, dadas las circunstancias, los trasladó a una plataforma online en búsqueda de reinventarse y asegurarse trabajo en estos tiempos difíciles. Sin embargo, mantiene la esperanza de expandirse al mundo, convencida de que nuestro país “es tan maravilloso que necesita conocerse a través de productos artesanales”.