Este año, la Argentina logró exportar cerezas, carne de cerdo, arándanos y miel a China; naranjas, mandarinas, pomelos, limones, nuez pecán y miel a Brasil; chía y limones a India; dulce de leche y carne ovina a Japón; y limones y carne a Estados Unidos.
En tal sentido, las exportaciones de alimentos representan el sector más importante de toda la matriz exportadora, reflejando entre el 41% y 45% de todo lo que Argentina le vende al mundo.
“Podemos afirmar que es el principal sector generador de divisas del país”, remarcó Andrés Murchison, secretario de Alimentos y Bioeconomía del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Al ser consultado sobre qué se debe hacer para que la Argentina deje de ser el granero y se convierta en el supermercado del mundo, Murchison respondió: “No se trata de ser una cosa o la otra, sino que podemos ser ambas. Gracias a la riqueza, diversidad y extensión de nuestro país, podemos ser granero y supermercado del mundo”.
Sobre ese doble papel, detalló: “Por un lado, seguir comercializando nuestros productos primarios, que son reconocidos en el planeta por el gran trabajo que han hecho los productores durante más de dos siglos, el desarrollo tecnológico y la innovación de los últimos años, que nos permiten ubicarnos en los primeros puestos exportadores; por otro lado, sabemos que la Argentina puede ser mucho más, por lo que trabajamos cada día para posicionar a nuestros alimentos en la góndolas del mundo”.
Según detalló el secretario de Alimentos, las herramientas que permiten avanzar en esa dirección y agregar valor se relacionan con la formación empresaria y la diferenciación, los acuerdos internacionales como el de la Unión Europea – Mercosur, las estrategias de promoción comercial que lleva adelante el Ministerio junto con la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional (AAICI), las misiones comerciales y las rondas inversas, y las mesas de competitividad por cadena.
Según los datos proporcionados por la cartera agrícola, en 2018 se exportaron 39,7 millones de toneladas por US$25.347 millones, con un valor por tonelada exportada de US$637,5. En relación a los primeros siete meses de 2019, comenzó a visualizarse un cambio de tendencia, ya que si bien los precios internacionales han disminuido, los volúmenes exportados tuvieron un crecimiento del 17,6% en volumen y el mismo valor que el mismo periodo del 2018.