El pulgón es una de las plagas que más habitualmente afecta a todo tipo de plantas. Estos insectos son comúnmente de color verde, aunque también los hay negros y amarillos, todos ellos de unos pocos milímetros de tamaño. Se alimentan sorbiendo los jugos de las hojas y tallos de las plantas, pero además segregan una sustancia azucarada que promueve la aparición de hormigas y un hongo negro.
Lo mejor para eliminar el pulgón de las plantas suculentas es utilizar un remedio casero en forma de insecticida para las suculentas, siempre elaborando nosotros mismos uno ecológico o comprando uno ecológico, siempre sin recurrir a los que son químicos comerciales demasiado dañinos también para las plantas.
Uno de los más prácticos con las suculentas es usar alcohol al 70% diluido en agua. Rociando con un pulverizador sobre tus suculentas afectadas, matarás al pulgón rápidamente. Normalmente las plantas no toleran bien el alcohol y este puede hacerles daño, pero las suculentas son tan fuertes y resistentes que no se ven afectadas por este. Tanto es así, que puedes usarlo incluso de forma preventiva. Eso sí, aplícalo siempre al anochecer para que no les dé el sol y evitar así las quemaduras solares en las hojas. También puedes entrarlas en casa y evitar que les dé el sol directo durante los días de tratamiento.
Contra el pulgón también funciona muy bien el jabón potásico, otro gran insecticida ecológico usado contra gran cantidad de plagas. Es muy fácil de adquirir y simplemente hay que disolver una cucharada de este en un litro de agua. Si calientas un poco el agua al mezclarlo, este se disolverá más fácilmente. Como con el alcohol, pulveriza las plantas al anochecer, buscando las zonas más afectadas por la plaga, y así no deberías tardar en notar el efecto.
La cochinilla algodonosa es otra de las plagas más temidas y comunes. Son insectos de unos 4 mm de tamaño, de color claro y cubiertos por la capa blanca de una sustancia que ellos mismos producen y que se acumula en las plantas. Se acumulan habitualmente en el envés de las hojas o bajo las raíces, aunque son más fáciles de distinguir por esa especie de “algodón” que les da nombre y que es en realidad sacos de huevos.
Es una plaga peligrosa porque la sustancia que producen puede provocar la aparición de otras enfermedades, como el hongo negro, por lo que hay que ponerle remedio cuanto antes. Si localizamos la plaga en un estado muy temprano, podemos retirar nosotros mismos los insectos de forma manual, con un bastoncillo o algodón impregnado de alcohol o jabón potásico. En caso contrario, será mejor rociar con una solución, como con el pulgón.
También podemos utilizar jabón de lavavajillas diluido en agua o aceite de Neem, unos remedios muy eficaces contra muchas plagas en suculentas. El aceite de Neem es un producto ecológico que puede comprarse online o en superficies especializadas, se aplica mezclando una cucharada del aceite en dos litros de agua y pulverizando la solución sobre las plantas, al anochecer y una vez por semana.
Los caracoles y babosas pueden ser muy voraces y comerse gran parte de nuestras plantas, haciéndoles mucho daño e incluso matándolas si no hacemos nada a tiempo. Son una plaga de exteriores, que prácticamente nunca aparece en plantas de interior.
Si ves un caracol o una babosa en tus plantas, no dudes en retirarlo manualmente, llevarlo a otra zona verde adecuada y buscar más para hacer lo mismo. Cuando son pocos, la eliminación manual será suficiente, pero si la plaga se ha extendido será necesario proteger tus plantas esparciendo círculos de cáscara de huevo triturada a su alrededor o colocando trampas de cerveza, que los eliminan con gran efectividad.
Los gorgojos son pequeños escarabajos con gran cantidad de formas y colores, que tienden a tener una especie de hocico alargado en su fase adulta. Sus larvas se comen las raíces de la planta, mientras que los adultos no se limitan a estas. Son especialmente peligrosos en hortalizas, pues obligan a tirar el producto al causar enfermedades e infecciones que afectan al ser humano. Lo mejor es recurrir al aceite de Neem, aunque ante casos severos podemos recurrir al control biológico de plagas y adquirir nematodos beneficiosos, que atacan a sus larvas y no afectan a las plantas.
Para terminar de hablar sobre cómo eliminar plagas en cactus y suculentas, queremos indicar otras plagas que también pueden afectar a estas plantas. Estas son otras plagas de las suculentas comunes:
Contra todas estas plagas, el alcohol, el jabón potásico y el aceite de Neem resultarán grandes aliados.
Como siempre, la prevención nos puede ahorrar mucho trabajo y disgustos en lo que a las plagas respecta. Por ello, aquí te damos algunos consejos para prevenir las plagas en las plantas suculentas:
Ecologia Verde