El problema posterior al Brexit crea un problema para los productores de patatas irlandeses

a salida del Reino Unido de la Unión Europea ha creado una trampa para algunos agricultores irlandeses que ya no pueden importar patatas de siembra británicas, pero la medida podría revitalizar el comercio nacional del producto.

La prohibición de las importaciones tiene el potencial de causar dolores de cabeza a los agricultores que cultivan papas para los consumidores y para la industria de los bocadillos, ya que el cambio a la papa de siembra del continente trae consigo un aumento de los costos de transporte y la perspectiva de importar enfermedades.

Antes del acuerdo comercial del Brexit , existía la preocupación por una amenaza para el tradicional "chip chip", ya que no estaba claro si las patatas británicas tradicionalmente utilizadas en las tiendas de pescado y patatas fritas irlandesas todavía podían importarse. El acuerdo comercial previo a la Navidad entre la UE y el Reino Unido resolvió ese problema y las patatas de “mesa” británicas continúan cruzando el Mar de Irlanda.

Sin embargo, las patatas de siembra, a partir de las cuales los agricultores cultivan sus cultivos, ya no pueden realizar el mismo viaje ya que las regulaciones fitosanitarias UE-Reino Unido ahora no están alineadas.

El Departamento de Agricultura advirtió a los agricultores irlandeses sobre el problema el año pasado dada su dependencia de las semillas de papa de Gran Bretaña, particularmente de Escocia. La mayoría se abasteció antes del final del período de transición del Brexit para poder plantar sus cultivos esta primavera.

Thomas McKeown, presidente del comité de papa de la Asociación de Agricultores Irlandeses (IFA), dijo que la producción de papas no se vería afectada este año, ya que la mayoría lo había planeado con anticipación. Sin embargo, advirtió que la prohibición podría presentar "un gran problema" el próximo año y más allá.

El fabricante de patatas fritas Tayto Snacks se movió, junto con sus proveedores, para recibir la entrega anticipada de sus existencias de patatas de siembra de Gran Bretaña y la UE antes de la fecha límite del Brexit. A pesar de la incertidumbre, buscó tranquilizar a los consumidores diciéndoles que tomaría las "medidas adecuadas" para mantener el suministro en los próximos años.

McKeown dijo que todavía hay esperanzas de que se pueda llegar a un acuerdo entre el Reino Unido y la UE que permita reanudar el comercio de semillas de papa. Pero en ausencia de un acuerdo, la mayoría de los agricultores irlandeses tendrán que obtener semillas de papa del continente mientras esperan que la industria autóctona se desarrolle. Se entiende que el ministro de Agricultura, Charlie McConalogue, está explorando cómo restablecer y desarrollar un programa nacional de semillas.

McKeown dijo que esto presenta "una gran oportunidad", pero advirtió que podría llevar años lograrlo. Dijo que los importadores están buscando a corto plazo en Francia y Polonia como posibles fuentes alternativas de semillas de papa.

Enfermedades

Existe preocupación entre los agricultores irlandeses de que traer más patatas de siembra continentales aumenta el riesgo de importar enfermedades como la podredumbre parda, presente en los Países Bajos y algunos otros países.

El agricultor de Co Meath, Paddy Reynolds, que abastece a Tayto y también vende a los supermercados, se abasteció de las patatas de siembra que necesita para el año en diciembre. Ese movimiento evitó una posible crisis, pero generó costos de almacenamiento adicionales.

Dijo que es "imperativo" que la industria de semillas nativas vuelva a funcionar. Sin un acuerdo entre la UE y el Reino Unido, tendría que "morder la bala" y obtener patatas de otras partes de Europa. Sin embargo, advirtió que un productor podría terminar sin negocio si una enfermedad importada como la podredumbre parda afecta su cultivo.

Cuando se le preguntó acerca de los esfuerzos para llegar a un acuerdo sobre semillas de papa, el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales del Reino Unido dijo que entiende la importancia del producto para los exportadores del Reino Unido y "seguimos colaborando" con la Comisión Europea "con el objetivo de encontrar un resolución pronto ”.

La comisión no se interesó por el tema, y ??un portavoz dijo que la exportación de patatas de siembra de Gran Bretaña a la UE "ya no es posible porque el Reino Unido ha decidido no seguir las normas fitosanitarias de la UE".

El Departamento de Agricultura dijo que la solicitud del Reino Unido de una derogación para las exportaciones de semillas de papa será examinada por la comisión y los estados miembros de la UE.

McKeown dijo que impulsar la industria autóctona de semilla de papa requeriría una inversión significativa, pero “la oportunidad está ahí si tenemos la voluntad de aprovecharla”. Dijo que no sabe si Irlanda alguna vez volverá a ser totalmente autosuficiente en este sentido, pero "por Dios, podemos hacerle un hueco justo con el respaldo de todos los sectores de la industria".

The Irish Times