Agroturismo en Neuquén: por qué lo eligen tanto

Hoy en día quienes vivimos en las grandes metrópolis tenemos una necesidad, a la hora de descansar buscamos la paz que entrega la naturaleza. Tal vez la genética de nuestros ancestros nos impulsa a ir tras formas diferentes de pasar los días. Momentos en los que la familia es el eje fundamental de la jornada. Aquellos donde se logra la conexión de cada uno de sus miembros con actividades artesanales o hasta ese momento sublime que es disfrutar de una gastronomía casera. Todo ese conjunto de cosas por momentos es esencial y cada uno de nosotros debemos tomarlo en serio para mejorar nuestra calidad de existencia. Parar la pelota, como decíamos en el barrio, tomarse el tiempo para respirar o simplemente para disfrutar del ocio y la desconexión tecnológica.

El turismo rural permite todo eso. Nos conecta con la vida de campo, vivenciando sus costumbres, gozando del entorno y, por sobre todas las cosas, de la hospitalidad y sencillez de las gente de las zonas rurales. Buena parte de estos lugares complementan la estadía con actividades recreativas y deportivas. Esta característica de turismo toma en Neuquén dos variantes, el Agroturismo y el Turismo de Estancias.

Agroturismo

Existen en toda la provincia fincas dedicadas a la producción de hortalizas, frutas, crianza de animales de granja. Hay otras que incorporan dentro de sus tierras distintas elaboraciones alimenticias como dulces, frutas en conserva, quesos y embutidos, por nombrar los más comunes.

Ruta de las chacras Neuquinas

El Ministerio de Turismo de Neuquén creó la llamada Ruta de las Chacras Neuquinas un convite a conocer cómo vive el trabajador rural, de qué manera realiza sus actividades con los frutales, o en la siembra y cosecha de determinados vegetales. Y otras más específicas que sólo se dan en determinados lugares como la protección contra las heladas, el raleo y la poda. En aquellas con producción mixta se incorpora comprender como se alimenta a los animales hasta como se elaboran los embutidos.

La oferta turística permite que el visitante participe de forma activa en los trabajos en huerta orgánica, que sepa recolectar frutas. Incluso saber elaborar determinados platos típicos, para luego degustarlos, por supuesto. Y en medio de todo eso hacer senderismo de interpretación.

Esta ruta turística enlaza localidades provinciales en las que la producción rural es un rasgo destacado. Ellas son San Patricio del Chañar, Vista Alegre, Centenario, Plottier, y Senillosa.

Estancias Turísticas

La otra opción, el Turismo de Estancias, brinda la posibilidad de conocer actividades agropecuarias y forestales que se desarrollan en entornos naturales más amplios, hablamos de miles de hectáreas. En algunos casos el campo, de uso pastoril, se entremezcla con el bosque nativo. Están ubicadas, también, en toda la provincia en lugares paradisíacos que varían desde la Cordillera de los Andes, la precordillera, sus ríos y arroyos, hasta la estepa patagónica.

En todas las estancias las actividades son, por volumen mayúsculas, ya que en ellas se cria además ganado ovino, vacuno y equino. Se ofrecen, de acuerdo con las épocas del año, participar de la esquila, ordeñe y la yerra. Algunas tienen coto de caza y opciones de pesca deportiva de salmónidos. Por el tamaño de sus campos actividades como la observación de aves, senderismo, cabalgatas, mountain bike y rafting, también se pueden realizar.

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