La "desverticalización del agro", otra mirada de la caída de las explotaciones agropecuarias

La presentación del último Censo Nacional Agropecuario que elaboró el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INDEC), iniciado en 2018 pero cuya versión final se publicó este año, reflejó que en la Argentina se produjo una caída del 25% en las explotaciones agropecuarias: de las 333.533 contabilizadas en 2002, cuando se realizó el anterior Censo, la cifra disminuyó a las 249.663 actuales. ¿Eso es sinónimo de que más de 80 mil productores abandonaron la actividad? No necesariamente. Los especialistas hablan de una “desverticalización de la producción”, y de un nuevo perfil que caracteriza al campo argentino.

“Hace 30 años, un productor agropecuario tenía, en el 90% de los casos, sus propias máquinas para trabajar sus lotes, y más del 60% o 70% tenían su tierra propia. Eso se fue desgranando por distintas razones. Por un lado apareció la mecanización masiva, el conjunto de las nuevas tecnologías y también el método de la siembra directa. Y 25 años después los productores alquilan tierras y subcontratan parte de los servicios que antes realizaban en gran medida ellos mismos”, analizó Roberto Bisang.

Bisang, economista recibido en la Universidad Nacional de Rosario, y con un Máster en Economía obtenido en el CEMA, fue el coordinador del último censo agropecuario del INDEC, organismo en el cual se desempeñó como director de Estadísticas del sector primario. Y explicó el rol fundamental que en las últimas dos décadas tuvo un grupo socioeconómico que motorizó la mencionada transformación en el agro: los proveedores de servicios agropecuarios.

“En Buenos Aires y Santa Fe principalmente apareció otro nodo, que son los llamados “proveedores de servicios agropecuarios”. ¿Quiénes son? Se trata de gente que por diversas razones ‘se cayó del sistema’, que no tiene tierras, que entonces compró máquinas y que con eso brinda servicios agropecuarios”, detalló.

La antesala al anterior censo realizado por el INDEC, en 2002, tenía como trasfondo una actividad agropecuaria bien diferente a la actual. La Argentina de los años 90’ no era la misma que la de 2021. En el medio, la paridad cambiaria del “1 peso, 1 dólar” se derrumbó con la crisis del 2001 y el cierre de miles de empresas de distintos rubros económicos que, claro está, el campo no pudo evitar quedar al margen, marcó la nueva etapa en el agro. Muchísimos productores sufrieron el remate de sus propiedades. Pero además, eran años de fuertes innovaciones tecnológicas hoy habituales, pero que representaron un cambio muy fuerte en la estructura económica y social.

Pero no todos los productores se pudieron amoldar. Y eso, en suma, generó la "desverticalización” de la producción. Algunos comparan el fenómeno del agro con lo que pasó en los últimos años con la industria automotriz: explican que allí también se percibió una descentralización, con la diferencia de que las grandes automotrices compran en el exterior, pero el campo lo hace "dentro del país". Hoy la contabilización de los mencionados “prestadores de servicios agropecuarios” muestra un sector de 28.211 profesionales que se dedican a este tipo de tareas. El 61% del área cosechada en el país, por ejemplo, se realiza con maquinaria contratada. Pero no es posible tener una comparación precisa con la de 2002: ese censo no consultó acerca de los prestadores de servicios agropecuarios, una categoría que hace casi 20 años atrás no representaba lo que hoy representa. Lo más cercano es la medición estadística de la Provincia de Buenos Aires, que midió esta variable desde 2002 y muestra un crecimiento que ronda el 70%.

La comparación de 2002 contra el 2018 comprende a un perfil de producción integrado, como el de los años 90’, con un perfil de “productores en red”, como detallaron los especialistas sobre el actual. Por eso, ante la idea de esa baja del 25% de las Explotaciones Agropecuarias (EAP) represente fielmente al número de productores, la pregunta que muchos analistas del sector se hacen es “¿hay efectivamente menos productores?”.

“En ese caso solo se estaría contando a los productores agropecuarios y no a los contratistas. O por ejemplo a los proveedores de semillas, que hoy son empresas especializadas, pero que hace 25 años atrás el productor hacía su propia semilla. Se trata entonces de un problema de precisión metodológica”, indicó otra fuente consultada por este mismo medio.

El Censo reveló cuáles son los tipos jurídicos que intervienen en las distintas explotaciones agropecuarias.

De las 249.663 explotaciones agropecuarias (EAP) censadas por el INDEC, la abrumadora mayoría son gestionadas cotidianamente en forma directa por el productor o miembros de la sociedad: el 91%. Pero es importante remarcar que el Censo Nacional Agropecuario no indaga acerca de la titularidad de los campos, lo que le da al trabajo de los censistas un marco de confidencialidad con los censados. Se trata de un “secreto estadístico”.

Voceros del organismo, por eso, salieron a remarcar que en ese punto se explica la gran respuesta que el censo tuvo de parte de los productores.

En Santa Fe, un diputado provincial había pedido al Gobierno de Omar Perotti que informara los nombres de los titulares de los 19 campos más importantes de la provincia. “Queremos saber cuál es su situación con fisco. Concentran nada menos que 581.513 hectáreas, y en el otro extremo hay 3.890 personas que tienen hasta 50 hectáreas, que apenas poseen en total 104.279,2 hectáreas”, había sido el pedido de Carlos del Frade, del Frente Social y Popular.

Pero desde el INDEC salieron a relativizar este tipo de pedidos. “Se relevaron explotaciones agropecuarias, no la titularidad de las tierras. Lo que usted hace es ir golpear en la tranquera, y se le informa qué es lo que se está haciendo, y hasta ahí llega la cosa. No se pregunta si la propiedad es del productor o no. Hemos sido muy prudentes en la confidencialidad”, explicaron.

“El agro hoy en día se trata de una red de productores. La concentración no solo refiere a tierras sino que se trata también de la producción, y el aprovisionamiento de insumos y de servicios”, concluyó Bisang.

La gestión del censo se realizó íntegramente en bajo la conducción de Jorge Todesca. El padre de la actual vicejefa de Gabinete, Cecilia, quien fue titular del organismo durante la Presidencia de Mauricio Macri. Falleció en febrero del año 2020, ya fuera de su cargo.

El agro y el mundo

Los especialistas coincidieron en que el fenómeno que se vive en Argentina va de la mano con lo que se presenta en otros países del mundo que comparten “agriculturas de punta”. En Estados Unidos, explican, más de 70% de las tierras son de dueños que no las operan. Canadá y Francia son otros de los modelos similares.

Un panorama semejante se encuentra en zonas fértiles como Georgia, Kazajistán o el resto de los países que durante décadas estuvieron bajo la órbita socialista. Lo que explican es que allí, en muchos casos, hombres fuertes del socialismo quedaron bajo el mando de las tierras y las nuevas empresas cooperativas de productores operan el terreno como contratistas. ¿Una experiencia diferente? No hay que irse muy lejos: Brasil, el país vecino y principal socio comercial de Argentina, “está aún montada desde la lógica de los grandes fundos”, comentaron.

A24