l año inició con un menor aporte del agro a la economía. Las cifras del primer mes del 2020 reflejan la caída de la economía y un aporte menor del sector al Producto Bruto Interno (PBI). La actividad agropecuaria ya no sería la gran traccionadora del país, dejando atrás los sorprendentes números de la campaña precedente.
Según el índice elaborado por la consultora Orlando J. Ferreres y Asociados (OJF), la economía cayó un 2,9% en enero del 2020. La gran sorpresa la dio el agro que, a diferencia de los meses previos, cayó un 0,6% interanual, con una contribución negativa de la rama agrícola del 1,7%. “En línea generales, el sector se ve condicionado y refleja los magros resultados del último trimestre del 2019”, indica el informe.
En este sentido, los representantes del sector no son muy optimistas ya que “no ven mayores indicios que les hagan anticipar una recuperación en el corto plazo, con una configuración macroeconómica repleta de incertidumbre”, aseguran desde la consultora.
Cabe destacar que, dentro de los sectores productores de bienes, también cayeron la industria manufacturera y la construcción, un 1,9 y 6,9% respectivamente. Por el lado de los servicios, se destaca una fuerte baja del rubro del comercio (6,9%), tanto en su rama minorista como mayorista, mientras que también se registraron contracciones de relevancia en el segmento de minerales no metálicos y metálicas básicas.
De acuerdo a los datos finales presentados por la consultora, el rubro que presentó una mayor caída a comienzos de este año fue el de alimentos, bebidas y tabaco, con una caída del 2,8%.