Ancestral Alimentación Funcional: al servicio de los antojos dulces

Por Brenda Lucente

En los últimos años fuimos testigos de un verdadero boom en torno a la alimentación saludable. En muy poco tiempo, surgieron numerosas propuestas para satisfacer la demanda de este nicho, que parece no tener techo. 

Tanto en dietéticas como supermercados, las opciones para saciar los antojos salados son varias. En cambio, cuando estamos deseosos de comer algo dulce, la realidad es diferente. 

A sabiendas de esto, Valentina De Volder (28) creó el año pasado -en compañía de una amiga- Ancestral Alimentación Funcional, una marca de mantequillas de frutos secos de un solo ingrediente, con la que ya está planeando su primera exportación al exterior. 

Muy amablemente, la emprendedora participó de una entrevista con Agroempresario.com, en la que nos habló del proyecto. 

“Ancestral nació en plena cuarentena. Tanto mi socia como yo trabajábamos en empresas multinacionales hace años. Nos conocimos por Instagram. Empezamos a hablar por ese medio y de ahí surgió que teníamos en común la pasión por la alimentación saludable. Las dos queríamos iniciar un emprendimiento. En un lapso muy breve hicimos todo”, relató la joven.

Si bien De Volder no es nutricionista, se define a sí misma como una “aficionada” a la alimentación saludable. De hecho, Ancestral no es su primer emprendimiento, ya que hace unos años tenía un proyecto de viandas nutritivas a domicilio. 

“Elegimos mantequillas porque a las personas les cuesta mucho encontrar algo para comer saludable que sea rico y dulce. Opciones saladas hay varias, aunque en el rubro dulce no está bien definido qué es y no es sano. La idea era que el público pudiera hacerse su propia comida con un producto con el cual es posible ser creativo”, contó la emprendedora.

La línea se compone de las siguientes variedades de mantequilla: nuez pecán, almendras, avellanas y almendras y coco. En unas semanas, se lanzará la versión de castañas de cajú. La receta es sumamente simple: solo contienen frutos secos. 

Para lograr la consistencia deseada, los mismos se tuestan y procesan “con mucha paciencia” hasta que largan sus propios aceites. Cada pote requiere de aproximadamente 200 gramos de materia prima. Los alimentos se venden en más de 170 dietéticas de todo el país y a través del canal de e-commerce de la marca.

“Hay muchas maneras de consumir el producto, tanto en recetas dulces como saladas. De todas formas, apostamos por el primer canal. Se puede comer a cucharadas, untarlo reemplazando al dulce de leche o sumar en frutas y licuados. Una buena alternativa es emplearlo como frosting en budines o relleno de alfajores. También recomendamos mucho utilizarlo para hacer leches vegetales caseras. El paso a paso es sumamente sencillo: hay que colocar agua, unas cucharadas de mantequilla en la licuadora y ¡listo!”, explicó De Volder.

Es importante aclarar que las cremas son bajas en carbohidratos y altas en grasas saludables. No contienen sal, azúcar, gluten o lácteos. Por dicho motivo, son aptas kosher y celíacos. También pueden ser consumidas por personas alérgicas a la proteína de leche de vaca. “Son súper saludables como los frutos secos, solo que en una versión cremosa y remejorada”, añadió la cofundadora.

Según ella, el valor agregado de Ancestral es, por sobre todas las cosas, que trabaja con un solo ingrediente. En este sentido, destacó que el público cada vez exige más alimentos confiables que no tengan en su receta componentes desconocidos. Otro aspecto por demás relevante es que las mantequillas permiten satisfacer de forma fácil y rápida los antojos dulces.

A futuro, tanto De Volder como su socia planean llevar sus productos al exterior. “Nos estamos preparando para eso, hablando con alguien que nos asesora al respecto. La meta es expandirnos por Latinoamérica el año que viene”, aseguró.

Emprender en pandemia

Previo al lanzamiento de Ancestral, De Volder tenía pensado irse a vivir a España. Sin embargo, sus planes se frustraron con la llegada de la enfermedad que paralizó al mundo. 

Si bien desde chica supo que quería emprender, en un primer momento tuvo miedo de crecer en el país. De todas maneras, trata de mantener la actitud positiva y focalizarse en los beneficios que está cosechando a partir del desarrollo de su marca.

Para poder concretar las creaciones de Ancestral, tanto ella como su socia invirtieron en la compra de varias máquinas, ya que al principio los equipos se les rompían debido a que no sabían cómo utilizarlos correctamente. 

Con el tiempo, a causa de la demanda, la producción fue lo primero que delegaron. Actualmente la misma es completamente tercerizada. El equipo también trabaja con un grupo de logística que realiza las entregas y una agencia de marketing que se encarga de promocionar los productos. 

“Fue súper jugado iniciar un emprendimiento sin conocer a mi socia y en este contexto. Por suerte nos salió bien”, afirmó la entrevistada.

¿Por qué Ancestral?

“El lema de Ancestral es volver a lo simple. Consumir productos ultra procesados es algo nuevo, nuestros ancestros no se alimentaban así. El propósito es regresar a eso: a comer sencillo y saludable. Antes, las abuelas cocinaban con comida real. No existían químicos en las alacenas”, concluyó De Volder. 

Características de las cremas

1) Refrigeración: no es necesario refrigerar las mantequillas, siempre y cuando su frasco esté bien cerrado y permanezcan en un lugar fresco y seco. En caso de guardarlas en la heladera, es importante tener en cuenta que probablemente cambie su consistencia. Para obtener nuevamente cremosidad, conviene retirarlas del refrigerador entre 5 y 10 minutos antes del consumo. 

2) Vida útil: las cremas vencen nueve meses después de su fecha de elaboración, independientemente de la apertura del frasco. 

3) Conservantes: las mantequillas son libres de azúcares, sales, edulcorantes y aceites agregados. Únicamente contienen frutos secos.

4) Separación de los aceites: ocurre de forma natural por decantación. Se trata del aceite natural de los frutos secos. 

5) Aptas: veganos, APLV, celíacos y kosher.