¡Alerta plagas! Cómo controlar los cultivos de invierno

Tras la sequía de agosto, arrancó septiembre y se registraron precipitaciones en buena parte del país. Si bien el escenario trajo alivio a varios productores, se generó una alteración por demás notoria en el comportamiento de las plagas que afectan a los principales cultivos.

Desde el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Marcos Juárez, señalaron que la situación es verdaderamente alarmante en relación a los ácaros. En lo que respecta a los pulgones, su presencia no se encuentra aún generalizada, aunque se visualizaron poblaciones de varias especies en distintas áreas de Córdoba y alrededores.

En cuanto a las leguminosas, los especialistas aseguraron que se reportaron poblaciones bajas de pulgón verde, mientras que en trampas de luz empezaron observarse capturas de polillas correspondientes a la primera generación primavero-estival de ciertas plagas.

Comportamiento

- Polillas: la captura en trampas de luz fue prácticamente nula a lo largo de los primeros meses de julio y agosto. No obstante, en el arranque de septiembre empezaron a registrarse los primeros vuelos de adultos de las especies Rachiplusia nu, Helicoverpa gelotopoeon y Splisoma virginica, aunque en baja cantidad.

También se evidenciaron adultos de Faronta (dargida) albilinea.

- Ácaros en trigo: previo a las precipitaciones, se registraron poblaciones variables de especies como Penthaleus major y Tetrancychus sp. Dichas plagas tienen reportado un impacto significativo en el desarrollo de los cultivos, que se traduce en el retraso y el decaimiento por intervención de la capacidad fotosintética de las hojas.

Por otra parte, si bien las lluvias fueron variables, limitaron el crecimiento de la población. De esta manera, se recomienda que los productores monitoreen el cultivo en su parte basal, sin descuidar la incorporación del pronóstico climático a la hora de evaluar medidas de control.

- Pulgones en gramíneas: al cabo de las últimas semanas, se observaron focos de infestación de Metopolophium dirhodum (pulgón amarillo) en ciertas localidades del norte cordobés. Asimismo, se reportaron casos aislados de Diuraphis noxia (pulgón ruso).

Para hacerles frente, desde el INTA aconsejaron el monitoreo de pulgones en los cultivos de trigo a medida que vaya aumentando la temperatura. Esto incluye la observación detallada de espigas en estadios reproductivos iniciales, debido a que el umbral de control para dicho pulgón (Sitobion avenae), es de 5 pulgones por tallo al momento de espigazón.

- Pulgones en leguminosas: se evidenciaron poblaciones de Acyrthosiphon pisum (pulgón verde) en cultivos de siembra temprana de arveja y alfalfares de más de 30 cm de altura. No obstante, las poblaciones aún no se han escalado a niveles importantes de daño económico.

Aclarado esto, desde el INTA sugieren realizar seguimientos semanales de cultivos y pasturas una vez que arranque la primavera.