Brasil lidera las exportaciones de maíz

ace una década, Alisson Paolinelli, ex Ministro de Agricultura de 1974 a 1979, dejó una audiencia asombrada durante un seminario. Dijo que el Brasil superaría fácilmente la producción de 100 millones de toneladas  de maíz. Sospechoso, los participantes del evento se miraron entre sí, sin creer lo que escucharon.

Después de todo, el país estaba patinando y no podía superar los 55 millones de toneladas por año. Brasil no solo logró esta marca, sino que también asumió la posición del mayor exportador de cereales del mundo el año pasado, desplazando a los norteamericanos anteriormente invencibles.

El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos publicó datos finales sobre las ventas al exterior del 2019. El país colocó 41,3 millones de toneladas en el mercado extranjero  , por debajo de los 42,7 millones de brasileños. Los argentinos exportaron 36,2 millones.

Los brasileños, por lo tanto, ponen otro producto en la lista de líderes mundiales, que ya ocurre con café, soja, carne de res, pollo, azúcar y jugo de naranja.

Brasil, un importante importador de maíz durante dos décadas, principalmente de Argentina  , comenzó a exportar en 1996 por Coamo Agroindustrial Cooperativa. Presionada por los bajos precios internos, la cooperativa celebró los primeros contratos de ventas en el extranjero.

Esta es la segunda vez que el país toma el liderazgo mundial en exportaciones. El primero, en 2013, ocurrió porque los estadounidenses tuvieron una pérdida muy grande en la producción, debido a la severa sequía en el Medio Oeste del país.

En 2019, los estadounidenses tenían maíz, pero perdieron el momento ideal para vender. Este liderazgo brasileño debería ser fugaz, pero el camino está abierto para una evolución aún mayor en el sector.

Los líderes estadounidenses ya han puesto 70 millones de toneladas de maíz por año en el mercado extranjero, pero en 2019 la siembra se retrasó y el mercado esperaba una cosecha muy por debajo del potencial de 360 millones de toneladas.

Este escenario de fracaso de la cosecha hizo que el productor almacenara el cereal esperando mejores precios. La cosecha de los Estados Unidos tuvo una pequeña caída, pero los grandes importadores, como Japón y Corea del Sur, ya habían decidido el producto de Ucrania, Brasil y Argentina.

El resultado, para los Estados Unidos, fue la pérdida del liderazgo mundial. En ese evento, Paolinelli dijo que aunque parte de los productores estaba altamente tecnificada, la mayoría todavía usaba una forma de producción extractiva y de subsistencia.

Además, según el ex ministro, el sector vio el maíz solo como un cultivo complementario al de la soja. Sin embargo, la creciente demanda interna y las exportaciones darían un gran impulso nuevo, según él.

El uso de maíz en la producción de etanol acaba de comenzar a despegar, pero el mayor impulso proviene de las exportaciones. Los principales importadores prefieren el cereal brasileño debido a la calidad del producto.

Revista chacra