Por Agroempresario.com
En un contexto marcado por la creciente presión sindical y la búsqueda de alianzas estratégicas, el futuro de Aerolíneas Argentinas comienza a verse con nuevos ojos. Tal como adelantó El Cronista, el Grupo Abra, conformado por las aerolíneas Avianca y Gol, mostró interés en adquirir parte de la aerolínea de bandera argentina, mientras el Ejecutivo ya inició conversaciones para su posible venta. Aunque Aerolíneas no estaba en la lista de empresas privatizables enviada al Congreso, la serie de paros que afectaron los principales aeropuertos del país ha acelerado este debate.
El Grupo Abra, creado para reunir marcas icónicas bajo un mismo paraguas, se ha convertido en un jugador clave en el sector aerocomercial pan-latinoamericano. Con una flota de 300 aviones y operaciones en 15 países, busca generar sinergias y reducir costos, manteniendo la independencia de las marcas que lo componen. Sin embargo, la posible entrada de Abra en el mercado argentino no es la única oferta en la mesa. Otras empresas, como Latam, Azul Líneas Aéreas y el empresario Germán Efromovich, también han expresado su interés por Aerolíneas Argentinas.
La compañía estatal, dirigida por Fabián Lombardo, ha reducido su déficit operativo en más de un 70%, pasando de 272 millones a 79 millones de dólares. A la par, la aerolínea ha reducido su plantilla en un 13% y Lombardo reconoció en una carta a sus empleados que la supervivencia de Aerolíneas pasa por adaptarse a sus competidores y abrirse a nuevos socios.
Mientras tanto, las negociaciones continúan y la posibilidad de privatización parece cada vez más real. Lo que está claro es que Aerolíneas Argentinas enfrenta un momento clave de transformación, donde las alianzas internacionales podrían marcar un antes y un después en su historia.