Por Agroempresario.com
En medio de un panorama donde el consumo de carne vacuna sigue en descenso, la carne de cerdo se afianza como una alternativa cada vez más popular entre los argentinos. Este cambio de hábitos no solo ha llevado a una mayor demanda de esta proteína, sino que también ha incentivado su revalorización en el mercado.
Según la organización Hoy Cerdo!, el corte más recomendado para preparar la clásica "porchetta" en Argentina es la panceta. Este corte, que se puede solicitar en las carnicerías sin huesos, destaca por su composición: más del 50% de su grasa es ácido oleico. Además, su método de cocción lenta permite una significativa reducción de la grasa, lo que resulta en un sabor único y atractivo para quienes lo prueban. "Es tan importante que los italianos mediante el Ministerio de Agricultura lo certifican como prodotto agroalimentare tradizionale (receta tradicional de Italia)", se señaló en el artículo de La Nación.
En este contexto, también ha surgido un incremento en la oferta gastronómica relacionada con la carne de cerdo. Cada vez más restaurantes están ofreciendo sándwiches de porchetta, y existen numerosos recursos y programas de chefs destacados que enseñan a prepararla en casa. La tradición de la porchetta, que se originó hace más de 500 años en Italia, ha llegado para quedarse en la cocina argentina.
Por otro lado, la producción porcina en Argentina está experimentando un crecimiento notable. Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, el año pasado se alcanzó un récord con una faena de 8,1 millones de cabezas, marcando trece años consecutivos de crecimiento. En 2023, la producción aumentó un 5,4%, con 761.863,5 toneladas, mientras que las exportaciones alcanzaron 13.658,2 toneladas, un incremento del 47,6%.
Sin embargo, el contexto económico del país también juega un papel importante. La consultora JLU, dirigida por Juan Luis Uccelli, destacó que "ahora, al estar a fin de mes, se nota en los bolsillos y las ventas que están, a pesar de la primavera, congeladas. Plata no hay”. Esto sugiere que, aunque la carne de cerdo esté ganando terreno, el consumo general se ve afectado por la situación económica del país.
Así, la carne de cerdo se posiciona como una opción viable y deliciosa en la mesa de los argentinos, con la panceta liderando el camino hacia nuevas tradiciones culinarias.