En el corazón de la zona núcleo agrícola de Argentina, la Escuela Agrotécnica Nº 327 de Bigand, Santa Fe, está revolucionando la educación con un modelo que integra tecnología de punta y prácticas agroindustriales sostenibles. Este enfoque innovador tiene como objetivo formar jóvenes con las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos del sector agropecuario y el mundo laboral.
Bajo la dirección del ingeniero agrónomo Mauro Grassi, el establecimiento ha incorporado equipamiento tecnológico avanzado gracias a una colaboración estratégica entre el sector público y empresas privadas. Este modelo educativo busca preparar a los estudiantes no solo para ingresar al mercado laboral, sino también para continuar sus estudios universitarios.
José María Piccioni, productor agropecuario local y principal impulsor de la iniciativa, explicó:
"Queremos que los jóvenes tengan acceso a conocimiento de alta calidad y se motiven a participar activamente en el desarrollo regional. Esta articulación entre sectores es clave para el futuro del agro y de nuestras comunidades".
La escuela cuenta con 150 hectáreas propias dedicadas a prácticas agrícolas y experimentación. Los estudiantes trabajan en proyectos que abarcan desde biotecnología hasta la gestión de residuos, aprendiendo a aplicar soluciones tecnológicas en problemáticas reales del agro.
Además, especialistas internacionales capacitan a los alumnos en temas como trazabilidad de productos y sostenibilidad, áreas de creciente importancia en la agroindustria moderna.
Más allá de lo académico, el proyecto busca generar un cambio profundo en comunidades rurales como Bigand, donde viven menos de 10 mil habitantes. La incorporación de tecnología no solo mejora la productividad agrícola, sino que también promueve el empleo de calidad en la región.
"Esta escuela no solo forma jóvenes para el agro, sino también ciudadanos comprometidos con su entorno. Es un modelo que debería replicarse en otras localidades", destacó Piccioni.
La experiencia, que ya beneficia a 350 estudiantes, sigue expandiéndose con propuestas que van desde charlas de salud integral hasta proyectos de investigación, fomentando una formación integral que combina el conocimiento técnico con habilidades humanas y de liderazgo.