Por Agroempresario.com
El maíz argentino continúa demostrando su fortaleza en los mercados internacionales, con un noviembre de 2024 que batió récords en términos de declaraciones juradas de venta al exterior (DJVE) para la campaña 2023/24. Según el informe de los especialistas de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), Blas Rozadilla y Emilce Terré, durante el mes pasado se exportaron más de 2,5 millones de toneladas de maíz, convirtiéndose en el segundo mayor volumen de ventas en la historia para este mes, solo superado por octubre de este año, que también presentó cifras excepcionales con 2.672.429 toneladas exportadas.
Este fuerte desempeño en noviembre es aún más relevante si se considera que, en los últimos 10 años, las exportaciones de maíz en noviembre han caído, en promedio, un 28% respecto a octubre. Este año, la caída fue mínima, de tan solo 6,3%, lo que refleja un mercado más firme y una dinámica favorable para el cereal argentino.
El estudio resalta además que noviembre de 2024 fue un mes excepcional en cuanto a los compromisos de venta al exterior. Las DJVE registradas en noviembre alcanzaron las 2.136.387 toneladas, el mayor volumen histórico para este mes, superando en un 12% a las registradas en noviembre del año pasado. Este crecimiento en las declaraciones se traduce en una mayor certeza de los volúmenes que se exportarán durante la campaña 2023/24, que ahora podría alcanzar un total de 34 millones de toneladas, según las nuevas estimaciones de la BCR.
La revisión al alza de las proyecciones de exportación se da en un contexto donde la Argentina, con una cosecha récord, está en camino de generar más de 6.900 millones de dólares por sus ventas de maíz al exterior. Sin embargo, la incertidumbre sigue presente, especialmente respecto a las ventas para la campaña 2024/25, ya que las declaraciones de venta para el maíz de la nueva campaña están siendo más lentas que en años anteriores.
El informe de la BCR explica que el lento avance de las declaraciones de ventas para la campaña 2024/25 se debe a la falta de incentivos para anticipar el pago de los derechos de exportación. Esto se debe a una macroeconomía aún inestable, con un dólar que ha mostrado debilidad frente al peso argentino y una tasa de interés atractiva, pero también a las expectativas del sector en relación a una posible reducción de las retenciones, algo que el actual gobierno ha dejado claro que está en estudio, aunque no ha tomado decisiones definitivas aún.
La evolución de las ventas de maíz al exterior sigue siendo crucial para la economía argentina, que depende en gran medida de la exportación de granos para fortalecer sus reservas y asegurar el ingreso de divisas. Sin embargo, con un contexto más estable en los últimos meses y un mercado que sigue mostrando señales de optimismo, la proyección de exportación para la campaña 2023/24 se mantiene firme, con un volumen que podría superar los 34 millones de toneladas al cierre de la misma.