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Por Agroempresario.com
La Florida, un pequeño pueblo ubicado a tan solo 50 kilómetros de la capital de San Luis, es el lugar perfecto para quienes buscan escapar del bullicio urbano y sumergirse en la tranquilidad de las Sierras Puntanas. En un artículo publicado en La Nación, este destino se describe como un verdadero paraíso natural, rodeado por el majestuoso Embalse La Florida, que ofrece actividades tanto para los amantes de la aventura como para aquellos que buscan descansar y disfrutar de la paz del entorno.
El complejo Graciana Residences & Resort, ubicado en este pintoresco pueblo, se destaca por ser un refugio único en el corazón de la naturaleza. Con 42 hectáreas protegidas de vegetación autóctona, este destino ofrece una oferta variada para todo tipo de visitantes. Entre sus principales atractivos se encuentran el parque de relax, las piscinas al aire libre, el solárium y la guardería náutica. Además, quienes busquen bienestar encontrarán un gimnasio completo, sauna y un hidromasaje con vista al embalse.
Por otro lado, la gastronomía local se posiciona como un gran atractivo de la zona, con el restaurante Nativo, dirigido por el chef Juan Pablo Abdala, como referente culinario. Según el artículo de La Nación, Abdala fusiona los sabores locales con la cocina internacional, destacando platos como la perdiz confitada, las setas salteadas con cebollas caramelizadas y los ravioles de salmón negro, entre otros. "No me gustan las cartas extensas, me parece que la gente se aburre leyendo", explica el chef sobre su estilo de cocina, caracterizado por la rotación constante de platos y el enfoque en la calidad de los ingredientes.
Con una oferta que va desde deportes acuáticos en el embalse hasta caminatas serenas por las sierras, La Florida se presenta como un destino ideal para aquellos que desean reconectar con la naturaleza y disfrutar de la tranquilidad que ofrece este pintoresco rincón de San Luis. Un lugar donde el tiempo parece detenerse, invitando a los viajeros a desconectar y a revitalizar cuerpo y mente.
