Nueva tecnología de siembra que hace la diferencia

Indecar presentó en Expoagro nuevas tecnologías para sus equipos y desafiaron que “van a cambiar el sistema de siembra en la Argentina”. “Nuestra tecnología sustituye el resorte en el cuerpo de siembra por un sistema hidráulico”, resumió Andrés Méndez, técnico de Indecar, y amplió que “aunque ya existen opciones como pulmones neumáticos o mecánicos, decidimos implementar un sistema hidráulico en nuestras máquinas y todas nuestras sembradoras vienen equipadas con este sistema que reemplaza el resorte”.

En declaraciones a El Tribuno Campo, Méndez consideró que “una vez que una empresa adopta esta solución, queda claro que el resorte no es ideal para la siembra, que puede ser mejorado sustancialmente, y esto obliga a las otras marcas a seguir el cambio que iniciamos para no quedar en desventaja frente a lo que ofrecemos” y aclaró que “no es necesario cambiar las sembradoras, porque las máquinas usadas también pueden adaptarse a este avance tecnológico”.

“Otras empresas están tomando medidas para adaptar cuerpos de siembra a cualquier chasis y están equipando sus cuerpos de siembra con nuevas tecnologías y, en el caso de Indecar, ofrecemos la posibilidad de incorporar el sistema hidráulico para reemplazar el resorte y también de vender el cuerpo de siembra de manera independiente”, dijo Méndez, y precisó: “Tenemos dos tipos de máquinas, unas de tiro de punta y otras neumáticas: las primeras vienen completamente equipadas de fábrica con el sistema hidráulico integrado que no depende del tractor y alimenta las bombas que accionan el tren cinemático encargado de dosificar las semillas y los fertilizantes y, las segundas, las Air Drill, ya sean neumáticas o a chorro, también vienen completamente equipadas con esta tecnología de fábrica”.

Finalmente, técnico de Indecar aseguró que estos desarrollos tecnológicos se traducen en ventajas en cuanto al rendimiento de los cultivos y explicó que “en la Air Drill, diseñada para grano fino como para soja, la distribución de la semilla es muy precisa, porque cada surco tiene su propia salida desde la base de la tolva y es acompañado por aire, lo que asegura una distribución prácticamente perfecta; mientras que el sistema hidráulico evita que la máquina salte, garantizando una distribución uniforme y precisa”.

“Comparada con una siembra mecánica tradicional, por su buena distribución de las semillas y una profundidad de golpe uniforme, en ensayos realizados por INTA y otros privados, esta tecnología arrojó un incremento significativo en el rendimiento: en soja, el aumento es de 400 kilos por hectárea y en trigo puede estar entre 400 y hasta 600 kilos más por hectárea”, concluyó.

AgroNoa