El Barrio Santa Teresa vive días de transformación con el avance de la obra de asfaltado en frío que contempla la pavimentación de 13 cuadras distribuidas en dos etapas. Este martes comenzó el segundo día de trabajo, consolidando una mejora significativa en la conectividad y transitabilidad del barrio.
La obra no solo responde a una demanda histórica de los vecinos, sino que además se enmarca en un plan más amplio de infraestructura urbana que alcanzará a más de 60 cuadras en distintos puntos del distrito. El objetivo es claro: mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, garantizando accesos más seguros, limpios y duraderos.
El sistema de asfaltado en frío utilizado permite una ejecución rápida y eficaz, reduciendo al mínimo las molestias para los frentistas y asegurando una mejor resistencia al paso del tiempo y las condiciones climáticas. Desde el Municipio destacaron la importancia de estos avances, que marcan un antes y un después para Santa Teresa y anticipan mejoras similares en otros barrios.
Además de los beneficios en materia de infraestructura, estas obras contribuyen al desarrollo urbano y promueven una mayor equidad territorial. Los vecinos han acompañado de cerca cada paso del proceso, valorando la ejecución concreta de promesas que transforman su día a día.
La transformación ya empezó en Santa Teresa, y continuará en otros rincones de la ciudad, fortaleciendo el vínculo entre comunidad y Estado a través del trabajo conjunto y sostenido.