Por Agroempresario.com
En defensa de la producción regional y del estatus sanitario de la Patagonia, el Gobierno de Tierra del Fuego, representado por la secretaría de Desarrollo Productivo y PyME, Carolina Hernández, participó en una reunión clave convocada para debatir los alcances de la Resolución 180 de SENASA. El encuentro reunió a funcionarios nacionales y provinciales de Tierra del Fuego, Río Negro, Neuquén, Santa Cruz y Chubut, junto con autoridades de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y el presidente del SENASA, para analizar los posibles impactos de la modificación de la histórica barrera sanitaria.
La principal preocupación expuesta por las provincias patagónicas se centró en el riesgo sanitario que implicaría habilitar el ingreso de carne con hueso proveniente de zonas libres de fiebre aftosa con vacunación. “Cuando uno habla de biología, no puede hablar de riesgo cero, ya que el mismo existe, aunque sea insignificante”, remarcó Hernández durante la reunión, haciendo hincapié en que incluso un riesgo mínimo podría desencadenar consecuencias graves.
Actualmente, la Patagonia posee la categoría de “zona libre de aftosa sin vacunación”, un estatus sanitario que ha abierto las puertas de mercados internacionales de alto valor, especialmente en la Unión Europea. La funcionaria fueguina advirtió que flexibilizar la barrera pondría en jaque esa condición: “Si ese riesgo se manifiesta y hay un foco, ¿qué haríamos entonces en una zona que está libre sin vacunación? El costo productivo y económico lo asumiría el sector patagónico”.
En paralelo a las preocupaciones sanitarias, los representantes provinciales también alertaron sobre los posibles daños comerciales. Hernández señaló que varios mercados externos ya han expresado que dejarían de importar productos patagónicos si se percibiera un debilitamiento de los controles sanitarios. “Eso generaría una pérdida significativa de mercados para la región”, advirtió.
Durante la reunión, se acordó avanzar en una agenda de trabajo técnico y solicitar a los países importadores documentación oficial que confirme si suspenderían efectivamente sus compras ante la flexibilización propuesta. Asimismo, se discutió la necesidad de fortalecer los controles en la barrera fitosanitaria y revisar los términos de la Resolución 180, con el objetivo de precisar qué tipos de cortes de carne podrían circular y bajo qué condiciones específicas.
Un punto central planteado por Tierra del Fuego y las demás provincias fue la necesidad de diseñar un Plan Sanitario Nacional que proyecte a toda la Argentina hacia la clasificación de libre de aftosa sin vacunación. “Si la región patagónica debe correr el riesgo de circulación intrazona, que ese riesgo sea a cuenta de que toda la Argentina avance hacia un mejor estatus sanitario”, propuso Hernández, destacando que esto beneficiaría al conjunto del país en su inserción internacional.
Finalmente, el Gobierno de Tierra del Fuego ratificó su compromiso en defensa de la producción regional, la protección del estatus sanitario de la Patagonia y la preservación de los mercados internacionales que sostienen el crecimiento de los productores locales. En ese sentido, reafirmó su disposición a seguir trabajando en conjunto con el resto de las provincias patagónicas y las autoridades nacionales, buscando consensuar soluciones que garanticen tanto la seguridad sanitaria como la competitividad internacional de la región.