Por Agroempresario.com
La decisión del Gobierno de reducir a 0% las retenciones a los granos hasta el 31 de octubre generó un fuerte impacto en el sector agropecuario. Entre los primeros en pronunciarse estuvo el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, quien celebró la medida y destacó que se trata de un paso importante hacia un reclamo histórico de los productores. Sin embargo, advirtió que el desafío será lograr que esta reducción se convierta en una política permanente y no en una simple herramienta coyuntural.
En declaraciones públicas, Pino sostuvo que la eliminación de las retenciones a los granos “no es un capricho” sino una condición fundamental para mejorar la competitividad del sector.
“La retención tiene un efecto totalmente contrario a lo que buscamos: perjudica la producción, restringe las inversiones y obliga a extremar el cuidado de los gastos. Además, distorsiona el mercado, ya que no permite competir en igualdad de condiciones con nuestros vecinos productores”, expresó.
El dirigente rural también remarcó que, aunque el anuncio constituye un avance, “lamentablemente no se incluyó la carne, un sector clave para la economía argentina”.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, fue el encargado de anunciar la medida y justificar en el marco de la estrategia oficial para aumentar la oferta de dólares en el mercado y reforzar las reservas del Banco Central. “Hasta el 31 de octubre habrá retenciones cero para todos los granos. No vamos a permitir que la vieja política busque generar incertidumbre para boicotear el programa de gobierno”, aseguró.
En paralelo, el equipo económico citó a la Mesa de Enlace para un encuentro en el Palacio de Hacienda. Según confirmó Pino, el sector fue convocado para este lunes por la tarde con el fin de analizar los alcances de la medida y discutir los próximos pasos. “Tenemos un intercambio diario con el Ministerio de Economía, pero este anuncio no se había anticipado. Ojalá logremos que esta reducción sea permanente”, señaló.
Durante la mañana, el ministro de Economía, Luis Caputo, mantuvo una reunión con el titular de CIARA-CEC, Gustavo Idígoras, para revisar los aspectos técnicos del régimen de retenciones cero. De acuerdo con la cámara exportadora, el encuentro se dio en un marco cordial y se resolvió avanzar en la implementación práctica del decreto publicado en el Boletín Oficial. “Colaboraremos en su pronta implementación”, afirmó la entidad.
El anuncio también despertó reacciones positivas en otras entidades. Carlos Castagnani, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), consideró la eliminación temporal de las retenciones como “una sorpresa” y recordó que se trata de un reclamo histórico del campo. Si bien advirtió que la medida tiene fecha límite, sostuvo que puede servir como un paso para demostrar que se trata de un impuesto injusto y distorsivo.
Por su parte, Idígoras remarcó: “Apoyamos toda medida que implique eliminar las retenciones aunque sean temporales. Falta ver los detalles de la forma de operar y cuándo se hará operativo”.
En cuanto a los efectos en los precios internos, Pino descartó un traslado directo a la inflación:
“El precio lo define el consumidor. Hoy la carne se mantiene estable y no veo que esta medida pueda impactar negativamente en los mostradores”.
El dirigente rural también subrayó la importancia del campo como motor de las economías regionales:
“Cuando el campo funciona y tracciona, eso se traduce automáticamente en derrame sobre las economías de cualquier ciudad o pueblo del país. No se trata solo de un beneficio particular, sino de un impacto positivo para toda la Argentina”.
Según Pino, la quita de retenciones abre una ventana de oportunidad para que los productores que tienen granos almacenados liquiden sus ventas, contribuyendo a reforzar el ingreso de divisas en un momento clave para la economía nacional.