El presidente del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), Gustavo Idígoras, advirtió sobre la necesidad de un marco legislativo urgente para consolidar la inversión y el desarrollo federal del sector agropecuario, durante la celebración del 50° aniversario de la Cámara de Legumbres de la República Argentina (Clera), según informó La Nación.
“El país tiene al sector más activo de su economía sin una ley de inversiones”, afirmó Idígoras, y señaló que la Ley de Inversiones Agroindustriales, que derivó en el Régimen de Incentivo para Medianas Inversiones (RIMI), es clave para impulsar proyectos que fortalezcan la competitividad del agro, sin implicar subsidios, sino mediante incentivos fiscales como devolución de IVA y amortización acelerada para inversiones desde 150.000 dólares.
Idígoras valoró la actitud del Gobierno hacia el agro, destacando la eliminación de restricciones a las exportaciones, los esfuerzos por eliminar retenciones y la promoción de negociaciones internacionales agresivas, en un contexto global de guerra comercial donde los mercados tienden a cerrarse. “Estamos ante un Gobierno que mira al agro como uno de los sectores más valiosos”, indicó.

El directivo recordó que el CAA, que agrupa 64 cámaras de 35 cadenas de valor, surgió en un contexto distinto, en plena pandemia y con un gobierno que tenía otra visión, pero con la vocación de integrar al país al comercio internacional. “La idea original del Consejo siempre estuvo vinculada a un Mercosur activo en negociaciones internacionales”, afirmó. Idígoras elogió la reciente gira del subsecretario de Producción Agropecuaria y Forestal, Manuel Chiappe, a China, como ejemplo de esa estrategia de inserción global.
En su discurso, Idígoras delineó tres pilares fundamentales para el desarrollo del sector agroindustrial: federalismo, innovación y sustentabilidad.
El presidente del CAA reclamó la aprobación de un paquete de leyes orientadas a garantizar competitividad y desarrollo federal, incluyendo:
Idígoras insistió en que estas iniciativas permitirán dar previsibilidad y seguridad jurídica a la agroindustria. “Estoy convencido de que en los próximos meses tendremos una enorme oportunidad legislativa para que, finalmente, la Argentina cuente con una legislación moderna”, concluyó.
Durante el acto, Idígoras también destacó la importancia de la apertura comercial sostenida y criticó la visión de “vivir con lo nuestro”, promoviendo que la estrategia de inserción internacional se transforme en política de Estado. Según el dirigente, la continuidad de estas políticas permitirá al país consolidar su posición en mercados globales, aumentar exportaciones y generar inversiones de largo plazo.
El CAA apunta a que estas reformas no solo aseguren la rentabilidad de los productores, sino también fomenten la competitividad federal, aprovechando el potencial de todas las regiones argentinas, no únicamente la zona núcleo, y estimulando la innovación tecnológica en semillas y biocombustibles.

En paralelo, Idígoras destacó que la industria de legumbres y otras cadenas de valor requieren un marco legislativo sólido que ofrezca certidumbre a inversionistas y productores, al tiempo que se asegure la sustentabilidad ambiental y social de la producción. Además, señaló que la incorporación de seguros agropecuarios ayudará a los productores a enfrentar riesgos climáticos crecientes, mientras que la Ley de Aplicaciones Fitosanitarias garantizará criterios uniformes y evitará regulaciones arbitrarias en distintas jurisdicciones.
En síntesis, el mensaje de Idígoras apunta a que, con un marco legal moderno y estable, la agroindustria argentina podría aprovechar la recuperación económica, incrementar exportaciones, mejorar la competitividad y generar desarrollo federal, consolidando al país como un actor global relevante en el comercio de alimentos.