La Rioja presentó este fin de semana la obra de infraestructura turística del Hito Kilómetro 4.000 de la Ruta Nacional 40, un nuevo espacio de recreación y servicios diseñado para mejorar la experiencia de quienes recorren uno de los trazados viales más reconocidos del país. La inauguración, encabezada por autoridades provinciales junto al Municipio de San Blas de los Sauces, reunió a turistas, residentes y prestadores del sector, marcando un paso significativo para el desarrollo turístico local y el fortalecimiento del corredor andino.
La infraestructura fue gestionada por la Secretaría de Turismo de La Rioja, que promovió la intervención en el punto exacto donde la Ruta 40 alcanza su kilómetro número 4.000. El objetivo de la puesta en valor es claro: brindar servicios esenciales y un espacio de encuentro para viajeros que transitan diariamente el corredor, considerado un símbolo de la diversidad paisajística y cultural argentina. Con una extensión que cruza el país de norte a sur, la tradicional ruta conecta regiones, climas y geografías que son parte del imaginario turístico nacional e internacional.
El nuevo punto de referencia incluye una plaza seca destinada a fotografías y momentos de descanso, un área de contemplación del paisaje característico de San Blas de los Sauces y una oficina de información turística que orientará al viajero en su paso por la zona. La intervención sumó también una posta policial, que permitirá reforzar la seguridad vial y turística, además de un cajero automático, prestación que no solo facilitará el acceso a servicios financieros sino que también dinamizará el movimiento económico en la región.
La jornada inaugural convocó a autoridades provinciales, municipales, prestadores turísticos, productores, artesanos y asociaciones de motociclistas, reconocidos usuarios del corredor que con frecuencia detienen su marcha en los hitos emblemáticos de la ruta. La participación ciudadana reflejó el carácter comunitario del proyecto y su potencial para integrarse a la vida turística, cultural y comercial del departamento.
Durante el acto, el secretario de Turismo de La Rioja, José Rosa, destacó el valor estratégico de la iniciativa para el posicionamiento territorial y la generación de oportunidades vinculadas a la actividad turística. “Seguimos avanzando con convicción y trabajo sostenido para impulsar el turismo como un eje estratégico de nuestra gestión. Estamos promoviendo infraestructura de calidad, fortaleciendo nuestros atractivos y consolidando la presencia riojana en los corredores más importantes del país. Estas acciones son fundamentales para el desarrollo y el futuro de nuestra provincia”, expresó.
La puesta en valor del Hito KM 4.000 se inscribe en una política de fortalecimiento turístico que busca incrementar la afluencia de visitantes, diversificar la oferta y consolidar a San Blas de los Sauces como un destino dentro del mapa federal. Para el sector privado, la obra representa la posibilidad de captar mayor flujo de tránsito, incrementar servicios asociados y proyectar nuevas experiencias turísticas vinculadas al entorno natural, la producción artesanal y la identidad local.
Más allá de su función operativa, el hito adquiere un significado simbólico para los viajeros. La Ruta 40 es escenario recurrente de travesías a lo largo del país, tanto para quienes recorren tramos breves como para quienes asumen el desafío de atravesarla en su totalidad. El kilómetro 4.000 es punto de fotografía, de descanso, de registro personal y colectivo. Convertir ese sitio en un espacio equipado y ordenado implica consolidar parte de la cultura de ruta que define la experiencia de viajar por Argentina.
El entorno sauceño forma parte del atractivo: montes, relieve árido, cielos amplios y la impronta de una comunidad que convive con el tránsito turístico sin perder su propia identidad. El hito se integra así a un paisaje que ofrece visitas a bodegas, artesanías regionales, fiestas populares y circuitos productivos, elementos que enriquecen la experiencia del visitante y lo invitan a prolongar su estadía.
El diseño del espacio apunta a recibir turistas durante todo el año, considerando la afluencia creciente de motociclistas, viajeros familiares, ciclistas y aventureros que eligen la Ruta 40 como camino de descubrimiento territorial. Con servicios básicos garantizados, el kilómetro 4.000 aspira a convertirse en referencia obligada para quienes registran su paso, descansan, consultan información o deciden explorar la región antes de retomar la marcha.
La iniciativa provincial dialoga con proyectos nacionales que buscan descentralizar los flujos turísticos, potenciar destinos emergentes y promover la competitividad territorial. En ese marco, La Rioja apuesta a una infraestructura que acompañe el crecimiento del sector, mejore la experiencia carretera y fortalezca la integración regional entre provincias conectadas por la emblemática ruta.
El desarrollo de nodos turísticos sobre corredores viales es una tendencia creciente que responde al comportamiento de un viajero más autónomo, que opta por desplazamientos vehiculares y combinaciones de actividades en ruta. La inclusión de servicios adicionales como información, seguridad y extracción de dinero contribuye no solo a la comodidad sino también a la previsibilidad del trayecto.
Con la inauguración, el gobierno provincial reafirma su estrategia de posicionamiento, promoviendo el aprovechamiento de un recurso turístico con arraigo cultural y alta visibilidad. La intervención en el Hito no solo ordena y embellece el espacio, sino que busca capitalizar su valor simbólico para convertirlo en un punto de referencia nacional.
A partir de ahora, el Hito KM 4.000 de la Ruta 40 se proyecta como sitio de parada obligada para viajeros de distintos orígenes, como carta de presentación para quienes ingresan a la región y como espacio identitario para la comunidad que lo sostiene. La Ruta 40 es relato, aventura y mirada hacia la profundidad del territorio. Y La Rioja, desde este punto exacto, suma un motivo más para ser descubierta.