 
Frontera Sustentable S.A, liderada por Diego Heinrich, también vicepresidente de Maizar, presentó su Proyecto Patagonia Sustentable en la Mega Exposición de Ideas organizada por Multimedios Agroempresario en el Hotel Sheraton de Buenos Aires. El proyecto busca generar “un polo de desarrollo agrícola- ganadero bajo la concepción de la agricultura sustentable en Neuquén”.
¿Por qué invertir en Neuquén? Actualmente, la provincia tiene “un crecimiento demográfico muy importante; hoy, con 500 mil personas, tiene un enorme potencial para el mercado, fundamentalmente de proteínas, leche, carne y pollos”, explicó Heinrich y señaló que todo se importa de la Pampa Húmeda; incluso la producción que se hace en la provincia se hace con granos y forrajes importados del norte de La Pampa y el sur de Córdoba. “Esa es una gran oportunidad que nosotros vemos para poder abastecer ese mercado y transformar en carnes”, destacó.
En números, Neuquén consume “4.800 toneladas de productos de carne aviar, que serían unas 23.300 toneladas de maíz, equivalente a 1.950 hectáreas; 25.000 toneladas de cerdo, que serían 1.900 hectáreas de maíz; 32.000 toneladas de vacunos, equivalente a 32.000 hectáreas de maíz”. Sin embargo, en la provincia se producen menos de 300 hectáreas del cereal, afirmó Heinrich.
Asimismo, el mercado externo es un gran demandante de la carne patagónica. Cuando se abrió el mercado de Estados Unidos, se generó una gran oportunidad: “Realmente es un mercado muy fuerte, es un nicho de mercado que realmente tiene mucho interés en la carne patagónica y que todavía no se está abasteciendo”, remarcó Heinrich. El diferencial de esta carne recae en que es libre de aftosa y, por lo cual, “tiene una marca registrada y un potencial de desarrollo de ocupar nichos de mercado muy bien valorados”.
Frontera Sustentable eligió desarrollar su proyecto en 14.911 hectáreas en Arroyito, Neuquén, ubicadas en la intersección de las rutas 237 y 22. “Estamos pensando desarrollar chacras implementadas; para nosotros el concepto de chacra implementada es que cada una de estas parcelas de 100 hectáreas perimetrales tenga 70 regadas bajo riego por aspersión y con pivots fundamentalmente. En estas unidades de desarrollo podrán invertir los inversores que nos acompañen”, describió Heinrich.
El desarrollo del Proyecto Patagonia Sustentable está basado en “dos tecnologías básicas: una es la siembra directa y la otra es el riego presurizado. La siembra directa porque son ambientes muy frágiles, que nunca han sido cultivados. Estamos convencidos de que el desarrollo de las tecnologías asociadas a la siembra directa son las que nos van a permitir a nosotros desarrollar el máximo potencial de todos los cultivos. Pensamos transformar lo que hoy es una arena de desierto, en un suelo desarrollado”, explicó el presidente de Frontera Sustentable. Asimismo, plantean la implementación de riego presurizado, fundamentalmente con pivot, “por una cuestión de cuidado del agua, que a futuro sabemos que va a ser obviamente un bien muy escaso”, indicó.
Aunque la principal inversión en Neuquén está relacionada con Vaca Muerta, “la provincia tiene que comer y lo que nosotros proponemos es desarrollar las proteínas dentro de la provincia”, detalló Heinrich.
Este proyecto tiene dos grandes externalidades positivas: por un lado, una alta rentabilidad social y ambiental y, por el otro, el cambio en la matriz productiva. En primer lugar, “genera una enorme cantidad de puestos de trabajo y movimiento; estamos hablando de 15.000 hectáreas perimetrales con casi 9.000 hectáreas bajo riego. El volumen de producción que tendrá va a generar una gran cantidad de movimientos de fletes y una gran cantidad de movimientos de transformación de estas materias primas en carnes”, determinó el titular del proyecto. Y señaló que, en cuanto a lo ambiental, “es un proyecto planteado con sustentabilidad”.
En segundo lugar, en cuanto a la producción, Heinrich explicó que hoy la provincia está muy ligada a la fruticultura y los viñedos; “esto, a lo largo de los últimos años ha tenido una crisis. Lo que hace este proyecto es incorporar nuevos cultivos, incluso extensivos, con otro sistema de comercialización, con otro sistema de transformación”.
El proyecto se convertirá en un polo de atracción de inversiones: “Estas 9.000 hectáreas bajo riego van a generar un cluster porque lo que estamos proponiendo es el desarrollo de áreas de agricultura, implantar los cultivos, desarrollarlos con pivot; luego van a venir los prestadores de servicios y también se desarrollarán galpones de cerdos y de gallinas y feedlots”, subrayó Heinrich e hizo hincapié en que esto “le da una competitividad muy fuerte a la producción a la cadena de la zona”, ya que se desarrolla la producción primaria y de carnes al lado del consumo.
