Lavamos el coliflor, lo secamos con un repasador y lo cortamos. Se pueden usar las flores y el tallo, solamente tenemos que sacar las partes duras.
Lo procesamos hasta que tenga forma de granos de arroz, de hecho, le dicen “arroz de coliflor”.
Ponemos el coliflor en una asadera con un poco de aceite para que no se pegue y cocinamos a horno medio durante 30 min.
Dejamos que se enfríe, lo escurrimos usando una bolsa de tela, yo tengo una que hice con un pantalón finito que convertí en short, pero pueden usar las que se usan para hacer leches vegetales. Sacarle bien el agua es el principal secreto para que quede bien crocante.
Mezclamos el coliflor con los demás ingredientes, y en una pizzera aceitada ponemos la mezcla comprimiéndola bien. Pueden usar la misma fuente que antes si nada se había quedado pegado (sino la lavan y la secan antes de usar).
La cocinamos a horno medio hasta que se dore. Y luego la despegamos con mucho cuidado y la damos vuelta. Para esto yo uso un plato grande que apoyo sobre la masa y doy vuelta para luego deslizarla de nuevo.
La cocinamos un ratito más para asegurarnos que quede crocante y cuándo esté tostada le ponemos todos los ingredientes de pizza que te tienten. La de la foto tiene: queso crema, tomate cherry, parmesano, albahaca morada, y aceitunas negras. Algunas de mis preferidas son; napolitana con mucho ajo, paparella con hongos, ajo y cebolla salteados, verdura y queso de rayar.
Infoagro