l Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) inspecciona los frigoríficos productores de alimentos de origen animal para asegurar que la mercadería que sale del país y que llega a la mesa de todos los argentinos sea sana, inocua y de calidad.
En esta línea, profesionales de Coordinación de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria del Centro Regional Entre Ríos junto a funcionarios del gobierno de la provincia, mantuvieron un encuentro de trabajo y posterior visita de inspección, donde establecieron estrategias de prevención y etapas de control sanitario para que la carne que llega al plato del consumidor sea segura.
El recorrido tuvo lugar en la planta cerrada de procesado de carnes porcinas, ubicada dentro del parque industrial de la localidad entrerriana de General Galarza del departamento Gualeguay.
En ese marco, estuvieron presentes Néstor Micheloud y Leandro Ravinale de la Coordinación Regional de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, Exequiel Alvarenque, director general de Producción Animal de Entre Ríos, y los propietarios de la empresa elaboradora de carnes porcinas.
Luego del recorrido por el predio, los técnicos del Senasa brindaron asesoramiento a los empresarios, en relación a las medidas a adoptar y las adecuaciones higiénico sanitarias a llevar a cabo en las instalaciones del establecimiento para volver a operar como Ciclo II, elaboradores (sin faena), para el procesamiento de carne porcina.
Este tipo de plantas de procesado de alimentos cárnicos, pueden abastecer a la exportación y al mercado interno, y son normalmente proveedores de restaurantes, hoteles e instituciones.
Es importante destacar que esta reapertura del establecimiento elaborador de carnes porcinas generará además de mano de obra para la localidad de General Galarza, un incentivo para nuevas empresas a instalarse en el predio del Parque Industrial.
Para que la carne y sus derivados no representen riesgos para la salud humana, los establecimientos elaboradores, faenadores e industrializadores, tanto para el consumo interno como para la exportación, deben cumplir con una serie de requisitos sanitarios y normativos específicos, por lo que resulta indispensable comprobar su cumplimiento, diaria y mensualmente.
De este modo, el Senasa realiza el control en cada uno de estos establecimientos que trabajan con productos, subproductos y derivados de origen animal, monitoreando e inspeccionando sus diferentes etapas de elaboración.
Estas inspecciones, realizadas por profesionales del Senasa, son las que permiten evaluar el cumplimiento, por parte de la empresa, de las diferentes exigencias propuestas por la normativa sanitaria vigente en lo que respecta tanto a la producción para exportación como la destinada a consumo interno.