En la Argentina existen 82.000 pymes que emplean a casi 3 millones de personas. Así lo afirmó Carlos Brown, diputado nacional con mandato cumplido, en el Congreso Audiovisual Argentina Supermercado del Mundo. Las pequeñas y medianas empresas se definen “en función de sus ingresos anuales o por la cantidad de gente que emplean”, explicó Brown. “El tema pyme en Argentina es realmente apasionante y la participación de las pymes agropecuarias también es importante”, indicó, aunque aclaró que en los últimos años la participación ha ido bajando.
Éstas últimas se enfrentan a tres problemáticas centrales que son las siguientes: comercialización, presión impositiva y financiamiento.
El primer tema está liderado por la logística, “algo realmente muy difícil en un territorio tan extenso como el que nosotros tenemos”, destacó el diputado (M.C). En principio, los transportes ferroviario y fluvial son muy escasos en nuestro país. A modo de comparación, Brown describió las situaciones en países extranjeros: “Estados Unidos tiene 150 mil kilómetros de red ferroviaria, Brasil 28 mil kilómetros y la Argentina solamente 18 mil”; en cuanto al transporte fluvial, “Estados Unidos tiene unos 40 mil kilómetros; Brasil, 13 mil kilómetros; Argentina, 800 kilómetros”. Es entonces que aparece el costo del flete, “porque nosotros usamos el transporte a través del sistema automotor; entonces vemos que el 93,1% de las cargas son transportadas por camión, mientras que solo el 5,4 por tren y el 1,5 por vía fluvial”, señaló Brown y explicó que los costos de transportar la mercadería en camiones son más altos que a través de las otras dos opciones: “El costo del camión es de 0,07 dólares por tonelada; el del tren, 0,04; y el de las barcazas, 0,01. Esto nos quita competitividad”; “Es más caro mandar de Salta al puerto que del puerto a Rotterdam”, ejemplificó.
Esto es, según Brown, un serio problema para los productores argentinos ya que impacta fuertemente en los costos de los cultivos: “El 28% en soja, el 40% en sorgo, el 28% en trigo”. Y, además, se les suma otro costo que es el de la intermediación, que tiene que ver con la participación del productor en la góndola; “Un producto agrícola sufre 5,95 veces con relación al productor y al consumo; o sea, entre el productor y el consumo hay casi 6 veces de incremento en el precio del producto”, explicó el diputado (M.C). Por ejemplo, según indicó, “entre mayo y abril de un año a otro, hubo 13 alimentos donde bajaron los precios al productor y 17 donde subieron los precios al consumidor”.
Por otra parte, la presión impositiva se vio reflejada en “el último informe de competitividad global del Foro Económico Mundial que dice que la Argentina ocupa el lugar 104 entre 138 naciones; en el caso argentino, los impuestos representan el 134% en las ganancias obtenidas por las empresas, es decir que el Estado, a través de diversos tributos, se queda con más plata que le queda a cada compañía como beneficio”, sostuvo Brown e indicó que “el peso de impuestos discriminado es del 34% con relación al PBI”.
En un análisis comparativo con el promedio global y el promedio de América Latina con nuestro país, el diputado (M.C) presentó los siguientes datos: “En Ganancias, Argentina tiene 35, el global es el 23 y América Latina, el 27; en el IVA, la Argentina tiene el 21, el global es 15 y América Latina tiene el 12; en seguridad social, Argentina tiene el 23, el global es el 16 y en la región es el 15”. Asimismo, detalló que en comparación con países también productores de alimentos, la Argentina también se encuentra en desventaja: “Nosotros tenemos el 32, China el 28, Tailandia tiene el 22, Malasia tiene el 21, Indonesia tiene el 14”.
En cuanto a la tercera cuestión planteada por Brown, el financiamiento, Brown señaló que el problema de las pymes es que no son sujetos de crédito, “por una cantidad de exigencias y una cantidad de realidades y, cuando lo son, el financiamiento es a corto plazo, las tasas son altísimas, las garantías que solicitan son muy difíciles de obtener, los balances y la documentación que hay que tener es extremadamente compleja y, cuando se lo dan, los montos en realidad son bajísimos”.
Finalmente, y ante estas problemáticas expuestas por el diputado (M.C) que afectan a las pymes, Brown sugirió una serie de propuestas para revertir la situación:
Infraestructura. “Hay que dotar con eficiencia a nuestro sistema de transporte de cargas, hay que fomentar el transporte fluvial y ferroviario, mejorando la interconexión con los distintos sistemas”.
Reforma tributaria. “Yo reivindico el rol del Estado como el orientador, el formador, el estratega, pero no el realizador. Acá hay que resolver esta cuestión porque hasta que no resolvamos el tamaño del Estado, no podemos decir que le vamos a dar de comer menos, y la forma de comer del Estado es a través de los impuestos”.
Sistema financiero. “Si nosotros nos vamos a manejar desde el punto de vista financiero como trabaja el Banco Central con sus exigencias, va a haber muy pocos sujetos de crédito, pero si lo que hacemos es ver el proyecto y sus posibilidades y financiarlo de acuerdo a esa manera con fondos específicos, manejados por los ministerios de Producción en las provincias, manejado por el Ministerio de Producción de la Nación, la cosa puede cambiar”.
“Las pymes, particularmente las pymes agropecuarias, son los grandes motores que generan la actividad económica en la República Argentina. Debemos tratar de insistir con todos los mecanismos posibles para darle cada vez más acción a los temas que les den mayor fortaleza y resolverles los problemas de sus debilidades”, concluyó Brown.