sta temporada 20202-2021 comienza con las incógnitas lógicas que en todas las actividades se imponen por la presencia de la pandemia. En el caso de la fruta fina ya están trabajando en los protocolos por el COVID 19, ya que se espera el ingreso de aproximadamente 300 cosecheros que participaran de la zafra y que llegan desde las provincias del norte.
Pero no solo eso porque además la aparición de una mosca (Drosophila suzukii) que afecta a la futa cuando está madura hace pensar en modificar las estrategias de cosecha, quizás levantar la futa unos días antes de su maduración, aunque muchos ya desechan esta alternativa.
Mientras tanto persiste la incertidumbre sobre el turismo y como se dará la temporada signada por el coronavirus. Cabe señalar que gran parte de la producción de vender al turista que vista la zona. Sin turismo también tendrá que pensarse la venta de la fruta, ya industrializada, a otros mercados.
AgroChubut