uando conoces como plantar y germinar semillas de calabaza lo haces para siempre. Además, cuando sabes todos los beneficios que tienen las semillas de calabaza, lo próximo que queres hacer es tener un huerto propio. Para esto es necesario tener en cuenta varios pasos que te vamos a contar y así poder cosechar calabazas como todo un experto.
Siguiendo los pasos a continuación y descubriendo todo lo que necesitas saber para germinar, plantar y secar las semillas de calabaza. Tendrás tiempo suficiente para aprender y poner en práctica tus habilidades directo en la tierra.
El proceso de germinación de las semillas de calabaza, requiere de mucha atención. Además, es un método perfecto para obtener raíces fuertes que luego trasplantar.
Para realizar este proceso paso a paso, primero debemos tener en cuenta un dato importante. Las semillas de calabaza las podemos encontrar en viveros o tiendas naturistas.
Ciertamente podemos utilizar las recién sacadas de la hortaliza, solo que aquellas que vienen procesadas ya están preparadas para su cultivo y son tratadas con químicos.
De esta manera, las semillas que ya están secadas y preparadas tendrán un proceso de germinación más rápido. De todas formas, si tenes el tiempo suficiente y las ganas de realizar los pasos tú mismo, segui leyendo y aprende como plantar y germinar las semillas.
Paso 1: Como hemos comentado, es necesario que cuentes con semillas aptas para su correcta germinación. Podes tratar con las que son extraídas de la hortaliza, pero existe la posibilidad de que estas no crezcan.
Paso 2: colocamos en un envase de plástico o matero papel absorbente, si no tenes a mano este papel puedes utilizar papel de diario. Humedece el papel en el fondo del matero y ahora será momento de colocar las semillas arriba del papel mojado.
Luego procedemos a colocar un poco más de servilleta encima con cuidado, esta también debe estar húmeda.
Paso 3: Una vez que tengamos nuestros envases y veamos que siguen húmedas en papel, proseguimos a colocarlas en un lugar que expulse calor o que sea bastante cálido.
Muchas personas utilizan electrodomésticos para darles el calor necesario.
Paso 4: Comprobar siempre que el papel sigue húmedo. Al cabo de 4 días aproximadamente podremos ver las raíces de nuestros retoños.
Ahora será cuestión de mantenerlas así hasta que veas que no tienen espacio para expandir sus raíces, será el momento de plantarlas.
El proceso de germinación antecede al de la siembra, ahora será el momento de mudar los pequeños tallos a un lugar con más espacio para crecer.
La plantación de las semillas de calabaza debe estar en un lugar con mucha humedad, sin embargo, el frio no permitirá que estas crezcan fuerte, como es el caso de los fuertes inviernos.
Así que la plantación dependerá de la fecha y del lugar de la siembra. Lo mejor es pasar los pequeños tallos a un lugar con tierra húmeda y seguir estos pasos:
Paso 1: La profundidad es importante. Para poder plantarlas debemos dejar aproximadamente un agujero con una medida de 5 a 8cm de profundidad, siempre dejando que el tallo se asome por la superficie.
Paso 2: Colocamos el tallo en dirección a donde queremos que crezca nuestra calabaza. La distancia que debemos respetar entre una planta y la otra será de aproximadamente 2 metros.
Existen semillas de calabaza pequeñas para plantar en donde podes dejar una distancia menor, hasta de 1 metro entre plantas.
Paso 3: Si hasta ahora ha ido todo bien, seguimos con el proceso de cuidado y riega.
Como dijimos, necesitan mucha humedad. Además, sus raíces tienden a ser muy profundas y el agua debe llegar hasta ellas.
Así que podes medir la humedad en la tierra con un palito lo suficientemente largo. Sólo debes enterrarlo cerca de las plantas y al sacarlo verás si este sale seco o mojado.
Si la tierra se muestra muy seca y llena de polvo, no dudes en regar la zona hasta que se vea húmeda y saludable.
El horario recomendado para regar las plantas es por la mañana. De esta forma, le damos la oportunidad de que pueda distribuir sus propiedades durante el día hasta sus hojas.
Paso 4: Fertiliza la tierra donde tienes tus plantas. Te recomiendo que utilices un abono orgánico para esto. La fertilización de la tierra es de suma importancia para brindarles salud.
Por si no lo sabías, si el tallo y la planta son fuertes, la maleza no se presenta. Las plantas germinadas absorben mucho mejor los nutrientes del abono, por lo que es recomendable aplicar la técnica de fertilización una vez germinadas las semillas.
Paso 5: Protege tus plantas de las plagas e insectos. Sabemos que suena como una lucha interminable, pero los mayores enemigos de las plantas de calabaza son los escarabajos, por lo que debemos apartarlos si los vemos merodeando las plantas.
Otra forma de alejar a los insectos, es con una mezcla de agua con un poco de jabón. Limpiamos las hojas con esta mezcla y alejamos a las plagas.
También se puede hacer uso de la mezcla de agua con amoniaco. Lo peligroso de esto, es que puedes alejar a las abejas y estas son muy importantes para su salud cuando las plantas.
Pero existe una solución, podes limpiar las hojas de tu planta con la mezcla durante las noches, así no afectarás a las abejas que estarían en sus colmenas.
Por otro lado, te recomendamos que tengas mucho cuidado con esto. Puede ser peligroso para la planta si nos pasamos aplicando este tipo de mezclas.
Lo que podemos estar esperando por mucho tiempo será la cosecha de nuestras hortalizas anaranjadas. Pero ¿Cómo saber cuándo es hora de cosechar las calabazas?
Existen muchos indicios que nos demuestran que la hora ha llegado. El proceso de cosecha es sencillo y no requiere de mucho esfuerzo.
Para aprender a cosechar correctamente las calabazas, segui estos pasos y no te pierdas en el proceso:
Paso 1: Debemos estar pendientes de las señales que muestran nuestras plantas, avisándonos que están listas para ser cosechadas.
Una de estas señales es el color, por lo general podemos notar un color brillante en la hortaliza (anaranjado) a excepciones de otros tipos de calabazas como las blancas.
Otra señal importante es la cascara, esta debe estar dura y resistente. Si podemos rayar la superficie fácilmente, entonces será un indicio de que necesita más tiempo para su cosecha.
Paso 2: Para recolectar las calabazas, utilizar una cizalla para cortar los tallos. Es importante tener en cuenta que no se deben quitar los tallos, ya que esto provocaría que se dañara muy rápido la hortaliza.
También es importante acotar que debemos dejar un trozo de este, ya que permitirá que se mantenga mucho más tiempo la calabaza en buen estado.
Paso 3: Una vez cortadas, es hora de retirarlas del huerto y almacenar para luego. Es recomendable colocarlas en un lugar frio y seco para que pueda aguantarte todo el invierno.
Tanto para su consumo como para plantarlas, es necesario un proceso de lavado y secado de las semillas de calabaza.
Una de las grandes ventajas de estas semillas, es que son grandes y pueden sacar fácilmente de la pulpa.
Antes de comenzar, es necesario decir que muchas personas utilizan diversas técnicas de secado de semillas y a continuación verás algunas de las más utilizadas.
Este método se basa en preparar las semillas para su correcta germinación, así que lo primero que haremos será seleccionarlas. Para esto seguimos los siguientes pasos:
Paso 1: Retiramos las máximas posibles de la pulpa de la calabaza. Esto podemos hacerlo con la mano o con una cuchara.
Quitamos todos los residuos y procedemos a lavarlas con mucha agua.
Paso 2: Después de tener todas las semillas limpias las metemos en un bol con agua tibia.
Lo que sucede con la temperatura templada es que engañamos a la semilla, haciéndole creer que es primavera y así despierte.
Las dejamos remojando en el bol por al menos 24 horas, con la finalidad de seleccionar las que sean prosperas y desechar las que estén vacías.
También se debilita la capa o concha de la semilla, que será provechoso para su correcto proceso de germinación.
Paso 3: El proceso de selección se hace respecto a las semillas que flotan y las que no. Las que floten podemos tirarlas, ya que son huecas por dentro.
Paso 4: Ahora es el momento de germinarlas o en su defecto secarlas para utilizarlas luego.
Nunca se deben dejar las semillas mojadas, ya que esto produce hongos y se dañarán con el paso del tiempo.
Para secarlas puedes utilizar un secador de cabello a temperatura ambiente, de esta manera evitarás que las semillas germinen. Es importante que todas estén muy secas para proceder a su proceso de plantación posterior.
En esta técnica se siguen los mismos pasos anteriores para secar las semillas de la calabaza. Solo que, en este caso, realizamos los siguientes pasos para hacerlo:
Paso 1: Una vez lavadas y seleccionadas las semillas, escurrimos bien el agua con un colador. Ahora, las pasamos todas a una hoja de papel absorbente y le dejamos reposar por unos 10 min.
Paso 2: Otra hoja de papel absorbente la colocamos encima de las semillas y damos pequeños golpes para secar bien estas. Podemos repetir este proceso cuantas veces consideres, hasta que estén totalmente secas y listas para guardar.
Por este motivo utilizamos más de una hoja de papel absorbente para asegurarnos de que el proceso de secado haya sido un éxito.
Otra manera muy común de secar las semillas de calabaza es al aire libre. La única desventaja es el factor tiempo, ya que demoraría mucho para poder guárdalas.
Sin embargo, es una excelente técnica si lo que quieres es guardarlas para luego sembrar. Así que síguenos a continuación con estos pasos para secar al aire libre:
Paso 1: Una vez extraídas las semillas de la pulpa y previamente lavadas, las colocamos en una bandeja. La intención de colocarlas aquí es que se esparzan sin tocarse unas a otras, ni quedar amontonadas.
Paso 2: Podemos colocar un pedazo de bolsa de papel en el fondo para absorber los residuos de agua. Continuamos por colocar las semillas al aire libre y en un lugar seco (libre de humedad).
Paso 3: Las dejamos reposar 1 mes. Es un tiempo estimado para secar por completo las semillas.
Quizás algunas de estas germinen un poco, por esto podemos cambiar la bolsa de papel los primeros días por una seca.
Paso 4: Mientras esperamos a que se cumpla el tiempo adecuado, debemos darles la vuelta a las semillas cada día para evitar que les salga moho.
Paso 5: Una vez terminado el mes de espera, es tiempo de guardar las semillas de calabaza. Colocamos estas en una bolsa de papel y las guardamos en un lugar que esté lejos de humedad, para luego utilizarlas para su consumo o para plantarlas.
Una de las principales cosas que debemos saber sobre estas es que estas prefieren crecer en el calor, que en zonas muy frías. Por ello, debemos elegir las mejores fechas del año para proceder a plantar las semillas de calabaza.
Las fechas más idóneas para sembrar las semillas de calabaza, son entre los meses de marzo, abril, mayo y junio, ya que corresponden a una de las estaciones con el clima adecuado “primavera" en el hemisferio Norte.
Claro que, si vives en unas zona templada o muy fría, lo mejor será que se germinen las semillas de calabaza en semilleros. Esta técnica de plantación ayuda a obtener las hortalizas en sitios donde el calor es muy escaso.
Es también importante tomar en cuenta que las calabazas necesita de mucha luminosidad, esto quiere decir que al plantar las semillas de calabaza debemos elegir un sitio en donde los rayos del sol sean constantes para su crecimiento.
Las temperaturas del suelo indicadas pueden variar entre cálidos y templados, de esta manera tendremos una cosecha más saludable. Estas temperaturas pueden entre 20ºC a 25ºC, de esta manera debemos cuidar la humedad de la tierra al igual que el calor del sol.
1.- Una vez plantadas las semillas es necesario podar las ramas, de esta manera se limita el crecimiento de la planta y así aprovechamos el espacio para el cultivo.
2.- Aporcar la planta para mejorar su fuerza. Esto se hace cubriendo con tierra parte del tallo (sin exagerar). Es recomendable realizar esto a los 15 días después del nacimiento de la planta.
3.- Tener una estructura para que la planta se mantenga erguida. Esto lo puedes hacer sosteniendo sus nuevas ramas con hilos o construir un enrejado alrededor de la planta.
Germinar y plantar las semillas de calabaza necesita de tiempo y mucha dedicación, por lo que es un trabajo arduo para tener al fin el placer de una hortaliza sana y grande. Así que siguiendo todas estas instrucciones y segui esta guía completa de como sembrar y recolectar tus hortalizas.
Esfera Botánica