Requerimientos del cultivo de nogal

La producción de nueces en el país se desarrolla principalmente en zonas tradicionales de las provincias de Catamarca, Mendoza y La Rioja. Dichas provincias producen el 81% de la producción nacional

Requerimientos del cultivo de nogal

Suelo

Requiere suelos profundos bien drenados y de textura media (franca a franca arenosa) que favorece un buen desarrollo radicular. El nogal es muy sensible a la falta de oxígeno (asfixia radicular), a la salinidad del suelo y del agua de riego. Puede desarrollarse en un rango de pH de 5 a 8. Las temperaturas del suelo óptimas para el crecimiento radicular son de 20-24ºC, por debajo de 5-7ºC y por arriba de 32ºC la raíz detiene su crecimiento.

El exceso de caliza en el suelo causa clorosis en el nogal, porque insolubiliza el hierro, manganeso, fósforo, magnesio y mineraliza lentamente el nitrógeno. Esto se soluciona con el aporte de quelatos.

 

Temperatura ambiental

El nogal necesita un período de reposo invernal. Requiere 800 horas de frío en promedio. Existen variedades como las francesas que pueden requerir hasta 1500 horas de frío y las californianas, 500 horas (las horas se miden en horas frío, con una temperatura inferior a 7,2ºC, contadas desde la caída de las hojas).

Las temperaturas bajas (heladas) en primavera después de floración pueden dañar yemas, flores, brotes y frutos.

 

Precipitaciones

La humedad ambiental especialmente en primavera perjudica el nogal, por ser un factor favorable para el desarrollo de bacteriosis, también precipitaciones concentradas en otoño perjudican la recolección y causa pérdida de calidad en el fruto.

 

Manejo del cultivo

  • Implantación: Durante la implantación del cultivo, debe considerarse la adecuada elección del sitio a plantar, la calidad de las plantas seleccionadas y las tecnologías apropiadas para cada región. El nogal es muy exigente en cuanto a las características del suelo. Éste, debe ser franco a franco arenoso, profundo, con napa freática preferentemente por debajo de 1,5 m. Esta especie es muy sensible a la falta de oxígeno (asfixia radicular) y no tolera la salinidad, por lo que los suelos deben tener una conductividad eléctrica menor a 2 mmohs; principalmente, deben ser libres de sodio (RAS menor a 4)
    En cuanto a las condiciones climáticas, son necesarias una alta radiación, bajas precipitaciones y humedad relativa baja. Las heladas tempranas, de otoño, que pueden afectar gravemente a las plantas jóvenes (hasta 3 años) y las heladas tardías, de primavera, que pueden producir mermas en la cosecha, son los factores de mayor riesgo.
    Es importante tener en cuenta que, en la mayoría de las variedades, las floraciones masculina y femenina no son simultáneas, por lo que debe considerarse en el lote, entre un 2 y un 5% de variedades polinizadoras.
    El suelo debe prepararse con algunos meses de antelación. La plantación debe realizarse durante el reposo invernal, teniendo en cuenta la disponibilidad de agua de riego. En la región patagónica, ha logrado un excelente resultado también, con la realización de “plantaciones diferidas” (extracción de las plantas de vivero en época normal (generalmente agosto), conservación en frigorífico a una temperatura entre 2 y 5ºC y plantación entre mediados de octubre y mediados de noviembre. Es muy importante tener en cuenta que las raíces del nogal son susceptibles a deshidratarse muy rápidamente, por lo que deben mantenerse las condiciones de humedad del sistema radicular desde su extracción en vivero hasta su plantación, reponiendo inmediatamente la humedad perdida en cualquier etapa y nunca dejar las plantas expuestas al aire y al sol.

Los dos sistemas de conducción más utilizados son vaso (en plantaciones a 7x4m, 7x5m y 8x4m) y eje central (a 8x8 y 8x7m). 

  • Nutrición: Para planificar una correcta fertilización, las necesidades deben ser chequeadas o controladas a través de análisis foliares. Normalmente se requieren aportes anuales de nitrógeno, fósforo, potasio, magnesio y calcio, según la edad del monte y densidad de plantación.
  • Riegos: El riego puede realizarse por métodos gravitacionales (surco o inundación) o presurizados (goteo o microaspersión). En el primer caso, es recomendable el riego por surco en los primeros 2-3 años, con riegos cuidados y frecuentes, pasando luego a los riegos por melga completa o inundación. No se debe regar con aspersión, ya que el mojado del follaje incentiva el desarrollo de problemas sanitarios, principalmente de bacteriosis. Las necesidades de agua deben ser provistas de acuerdo a la época del año y al tipo de suelo.
  • Cosecha: Puede ser manual, semi-mecanizada (uso de vibradores manuales) o mecanizada (vibradores mecánicos). El método empleado y la dimensión del equipo recolector influyen en el rendimiento de la cosecha.
  • Poscosecha: El proceso de poscosecha puede tener varias etapas: Descapotado. Lavado. Secado: lleva el contenido de humedad de la nuez, de 30-40% de humedad (humedad en el momento de cosecha), a 8-10%. Puede hacerse naturalmente (al sol), o artificialmente (mediante secaderos que utilizan corrientes de aire a 32-35°C, durante 24 a 48 hs). Conservación. Clasificación. Descascarado. Embalado.

 

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