Recorrida por fincas con cultivos hortícolas en Guaymallén y Lavalle

 mitad de marzo se realizó una excursión para conocer diferentes estrategias de producción que desarrollan los agricultores de la zona. En la misma participaron productores, asesores técnicos de la actividad privada, investigadores del INTA Mendoza y extensionistas de las Agencias de Extensión Rural (AER) Guaymallén y Maipú, de dicha institución.

Zapallo tipo AncoLa actividad fue coordinada por la AER Guaymallén, en el marco de un circuito general organizado entre asesores técnicos que trabajan en la zona y los productores. La idea original fue favorecer el intercambio entre productores y extensionistas, así como también con investigadores, para facilitar que las demandas del sector a nivel territorial fueran consideradas por todos.

La selección de las fincas que integraron el recorrido se realizó en base a los manejos específicos en cultivos hortícolas, que pudieran resultar de interés, dentro del cinturón verde de Mendoza y zonas aledañas y, además, según la participación de los productores en el armado de la propuesta.

De esta manera, se visitaron las fincas de tres productores jóvenes, que pertenecen a familias con historia en la actividad agrícola. El recambio generacional abre la posibilidad a construir una nueva forma de relacionarse entre los productores, para continuar trabajando en la mejora de sus condiciones productivas.

Tecnologías en el cinturón hortícola 

La primera parada fue en la finca de Fernando Mayol, en El Paramillo, Lavalle.  Se visitaron dos fincas en este sitio (de 66 y 68 hectáreas). Sus principales producciones son ajo, zapallo y cebolla.

El productor compartió su visión en relación a la implementación de normas de certificación de calidad, uso de agroquímicos, aspectos comerciales y especialmente la necesidad de tener mayor disponibilidad de agua. Luego presentó las diversas estrategias que utiliza para optimizar los recursos con los que cuenta, a partir del conocimiento adquirido mediante la experiencia de años dedicándose a estos cultivos. En este sentido, se mencionó la importancia de la rotación de los cuadros cultivados regularmente, la utilización de la niveladora láser para lograr uniformidad en esta tarea y por ende en el riego. De forma complementaria están utilizando una máquina para la aplicación de guano de forma eficiente. Se destaca también la aplicación de frío previo a la plantación de semillas de ajo, entre otras estrategias mencionadas.

La segunda parada se dio en la finca de Elio Maferra, un establecimiento de 1,5 hectáreas ubicado en Los Corralitos, Guaymallén. La finca ha sido trabajada históricamente por su padre, con experiencia en la plantación y comercialización de claveles. Actualmente la mitad de su producción es de flores y la otra mitad de hortalizas de hoja (en este momento rúcula y perejil). Desde hace un año el productor está experimentando con estos nuevos cultivos y haciendo diversas pruebas en técnicas puntuales, como por ejemplo el uso de invernaderos con sistema de riego por goteo para todas las plantaciones. Su objetivo es lograr que la producción sea continua para abastecer su actual destino comercial, que es una empresa de la zona con galpón de empaque. En este caso, la conversación giró en torno a: sistema de calefacción que poseen los invernaderos, plagas que afectan la producción, organización de la mano de obra y vínculo con cadenas de comercialización. Se destaca la rapidez con la que se adaptan a requerimientos del mercado y la actitud de arriesgarse a realizar actividades nuevas para el personal.

El último punto visitado fue la finca de Miguel Mateu, ubicada también en Los Corralitos. Posee 12 hectáreas destinadas a plantaciones hortícolas y 6 con olivos. En esta finca se realizan producciones de forma convencional, pero en un sector están trabajando con manejo agroecológico, es decir, minimizando la utilización de agroquímicos y aplicando bioinsumos (en transición hacia productos agroecológicos). Se generó un interesante y provechoso debate entre ambos tipos de manejo, ventajas y desventajas, así como también destinos comerciales de la producción agroecológica. En este análisis participaron el productor, el asesor técnico y el obrero que trabaja en las parcelas. También se mencionaron diferentes criterios de calidad de productos hortícolas que son una tendencia a nivel de consumo.

La AER Guaymallén y el INTA Mendoza, unidad de la que depende esa Agencia, agradecen al Ing. Agr. Guillermo Calderón, de la Cátedra Seminario de Aplicación Interdisciplinaria, de la Facultad de Ciencias Agrarias (UNCuyo) y al Ing. Agr. Martín Betancud (Bioinsumos La lombriz urbana), por su colaboración desde el comienzo para la realización de esta actividad. También se hace extensivo el agradecimiento a los productores que se sumaron a la propuesta, por brindar la posibilidad de conocer sus fincas y sus realidades, así como también por su generosidad para compartir abiertamente sus conocimientos y experiencias.

Como síntesis de la jornada quedó la inquietud de que estos espacios de encuentro continúen, principalmente entre productores, para que se puedan constituir puntos de intercambio de conocimientos de forma solidaria y colaborativa. Iniciativas auto-gestionadas y participativas entre productores son recibidas con beneplácito por parte del INTA. Sumado a esto quedó también la semilla plantada para que este tipo de actividades continúen, una vez que se levante la cuarentena, y que la relación entre productores y el INTA se afiance cada día más.

INTA Mendoza