l puerto de Bahía Blanca es una de las principales terminales exportadoras del país, que el año pasado movilizó más de 25 millones de toneladas de mercancías por USD 11.000 millones, siendo los granos y los productos petroquímicos los rubros que predominaron. Sin embargo, en lo que respecta a los despachos en contenedores los números no son tan significativos e, inclusive, de exportar por esta vía los costos son elevados, lo que motiva a que las empresas de la región opten por otros puertos a la hora de comercializar su producción.
Es en base a esta problemática que el Cluster Alimentario Puerto de Bahía Blanca, una Asociación Civil sin fines de lucro que agrupa empresas productoras de bienes y servicios que componen distintas cadenas productivas regionales, busca aumentar los embarques de contenedores con productos agroalimentarios a partir del contacto con navieras para aumentar la frecuencia de sus visitas al puerto e incrementar el volumen a cargar (escala) para disminuir los costos.
Así lo confirmó el integrante del Consejo Directivo del cluster, Mariano D’Amore, a Infobae. El también Tesorero de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca (BCP), entidad integrante del grupo compuesto por siete empresas y el Consorcio Consorcio de Gestión del Puerto, indicó que “uno de los grandes cuellos de botella que tiene el sector privado regional es que no tiene frecuencias navieras que le permitan reducir los costos del transporte marítimo para salir por Bahía Blanca. Por eso, queremos incrementar la escala con el objetivo de reducir los costos de transporte marítimo por unidad”.
Para D’Amore “hay ejemplos muy evidentes en varias cadenas productivas que le termina saliendo más barato llevar el contenedor a Buenos Aires y exportar por allí. Eso nos llevó a hacer un estudio para que tengamos un diagnóstico concreto y, en función de eso, saber por dónde encarar la solución”.
"Una de esas soluciones fue ponerse en contacto con las navieras y reefers (portacontenedores más pequeños con costos de embarque más bajos) para empezar a sondear de qué volumen estamos hablando para que el impacto del costo marítimo sea menor. En estos últimos meses estuvimos trabajando en eso”, dijo el entrevistado.
Según datos del Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca, durante 2019 se movilizaron en la terminal 25.228.412 toneladas, lo que significó el arribo de más de 1.000 buques. De ese tonelaje, 11.618.220 toneladas correspondieron a la carga de granos, 2.917.147 toneladas fueron de inflamables y productos petroquímicos; y solo 233.850 toneladas correspondieron a productos exportados en contenedores, de los cuales, en lo que respecta a productos agroindustriales, los más destacados fueron frutas (manzana y pera), trigo orgánico, jugos y alfalfa.
En este sentido, D’Amore explicó que “existe un problema importante con las escalas. Las navieras no tienen frecuencia precisa, razón por la cual las empresas no pueden determinar cuándo van a venir acá o cuándo no y eso le genera un elemento de incertidumbre y hace difícil programar desde el punto de vista de la logística” y agregó: “Al subir pocos contenedores, encarece el costo por unidad. Entonces la naviera que tiene que entrar en Bahía y pagar los costos del puerto, los que termina trasladando al flete por unidad. Esto significa que el costo que le incurre pasar por Bahía y cargar pocos contenedores”.
A partir de esto, afirmó: “Buscamos potenciar el puerto. El movimiento, en cuestiones de contenedores tiene su actividad, pero podría multiplicarse varias veces porque las cadenas como la de carnes, farináceas o apícolas casi no salen por Bahía Blanca y podrían hacerlo todas”.
El Cluster Alimentario es una iniciativa conjunta, llevada a cabo por el Consorcio General Puerto de Bahía Blanca, la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca y las empresas que lo componen, que se inició hace un año y en los próximos meses darán a conocer su plan estratégico de acción. Si bien lo componen empresas y entidades de la región, el cluster está abierto a ser integrado a cualquier empresa nacional que quiera exportar a través del puerto. En la actualidad está compuesto por empresas farináceas, de ganado bovino y porcino, ovoproductoras, apícolas, horticultoras, de semillas y de frutos secos.
El motivo de su constitución, según D’Amore es “cambiar el perfil de algunas pymes que exportan en baja escala o que han intentado hacerlo. Lo que queremos es que se haga con más frecuencia para potenciarlas y que se sumen a esto todas las empresas que estén con esa misma idea. Queremos cambiar el perfil del empresario que solo mira al mercado interno a nivel regional”.
En este sentido remarcó que “en el cluster se generan sinergias interactuando de manera conjunta entre varias empresas de distintos rubros, pero que tienen objetivos comunes. Hay elementos como recursos humanos , estudios de mercados, información, acceso a organismos públicos que, si se hacen de manera organizada y con una estructura se les hace mucho más liviano a muchas empresas que no tienen la estructura necesaria. Estamos en plena etapa de formación, de captación de empresas” y concluyó: “Buscamos que las empresas que quieran exportar lo hagan de la manera más simple y con el menor costo posible”.
Infobae