l maíz toma la delantera. Con la cosecha a punto de finalizar, la producción total del grano estará por encima de la de soja por primera vez en veinte años. El Gobierno, las bolsas de comercio y los especialistas adjudican el fenómeno a la sequía y a una mayor carga impositiva.
En el ciclo agrícola 2019/2020, la principal estrella y fuente de divisas del sector dejará una producción menor a la del maíz, un cereal que en los últimos años logró diversificar mercados y dar pelea a la oleaginosa.
Según los registros oficiales, se trata de la primera vez desde la campaña 1997/1998 que el maíz logra triunfar. Para la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), la producción total de soja estará en 49,6 millones de toneladas contra los 50 millones que se espera para el maíz comercial.
Por su parte, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación prevé 50 millones de toneladas para la soja y 55,5 millones para el maíz.
En el mismo sentido, la Bolsa de Comercio de Rosario proyecta para esta campaña una producción mayor para el cereal, estimada en 51 millones, mientras que para la oleaginosa espera 50, 7 millones de toneladas en el ciclo a punto de finalizar.
Desde todas las áreas apuntan a cuestiones climáticas y a la relación costo-beneficio de ambos cultivos. Las hectáreas de soja arrastran las consecuencias de una prolongada sequía, mientras que el maíz logró sortear con mayor comodidad el clima caluroso.
Respecto a los factores económicos y políticos, los mayores derechos de exportación para la soja le jugaron en contra. Con el cambio de Gobierno, tanto la oleaginosa como sus derivados pasaron a tributar un 33%, mientras que el maíz y otros granos solo están alcanzados por una alícuota del 12%.