l área técnica de Flora y Fauna dependiente de la Dirección de Recursos Naturales de la Secretaría de Agricultura y Ganadería del Ministerio de Producción, autoridad local de aplicación de la Ley Provincial de Pesca N°4.892, continúa realizando monitoreos periódicos respecto del estado y evolución tanto del recurso hídrico como de la fauna ictícola entrerriana.
La actividad de control se desarrolla en el contexto de la bajante extraordinaria del río Paraná y los estudios provinciales se complementan a los realizados por el Programa Nacional de Evaluación Biológica y Pesquera de Especies de Interés Deportivo y Comercial en el Río Paraná (EBIPES).
Se trabaja controlando estado, peso y tamaño de captura de los peces en el río Paraná, así como temperatura del agua y niveles hidrométricos, afectados por la bajante del río. Esta evaluación complementa estudios del recurso a nivel nacional.
Según señaló el director de Recursos Naturales, Mariano Farall, “este corredor de aproximadamente 800 kilómetros comprende zonas de pesca comercial como Puerto Ruiz, Puerto Esquina y Villa Paranacito y las zonas de pesca artesanal de Paraná, Pueblo Brugo, Hernandarias, Piedras Blancas, Santa Elena y La Paz”.
Asimismo, “todos estos monitoreos del recurso ictícola e hídrico fueron desarrollados durante la segunda quincena de mayo y la primera quincena de junio de 2020; y se prevé continuarlos repitiendo monitoreos en los principales puertos pesqueros de Diamante y Victoria”, dijo Farall.
Farall sostuvo que “al momento de estos muestreos en estas zonas de pesca, se puede inferir que las capturas ictícolas se hallan dentro del manejo ecosistémico. No obstante, las especies ícticas presentan cierto grado de estrés por las condiciones ambientales imperantes, pero de todos modos existe un equilibrio del recurso y la actividad pesquera: es decir, que a la fecha la especie Sábalo (Prochilodus lineatus) o Boga (Megaleporinus obtusidens) no se hallan en condiciones de especies amenazadas, dado que los reclutamientos comerciales de las especies tienen tallas por encima de la mínima recomendada de 42 cm de longitud total y de acuerdo a la legislación vigente”.
Se continúa monitoreando y tomando medidas que regulen la actividad en esta situación natural particular, como la de prohibir la pesca comercial en aguas de jurisdicción provincial y el acopio de productos de la pesca, desde los días viernes hasta las domingos, incluyendo feriados provinciales y nacionales, o la recomendada y tomada por la provincia en el marco de la Comisión de Pesca Continental del Consejo Federal Agropecuario; “una decisión importante de reducción del 50 por ciento del cupo remanente de exportación de sábalo y especies acompañantes, a manera de reducir del esfuerzo pesquero comercial”, indicó el funcionario.
La fiscalización del recurso se desarrolla de modo articulado entre las fuerzas de seguridad nacionales y provinciales, personal técnico de la Dirección de Recursos Naturales e inspectores de la Dirección General de Fiscalización Agroalimentaria dependientes de la Secretaría de Agricultura y Ganadería del Ministerio de Producción de la provincia.
Si bien cada jurisdicción provincial tiene autonomía para tomar decisiones en cuanto a la administración de sus recursos pesqueros; es preciso destacar que se viene teniendo una misma visión y análisis de la situación de las actividades pesqueras entre nuestra provincia y Santa Fe, que comparte la misma porción de la cuenca baja del río Paraná.
Ambos ejecutivos provinciales han permitido a partir de los decretos N° 833 y 495, habilitar en las aguas jurisdiccionales, la pesca deportiva en la modalidad costa y embarcados; teniendo en cuenta para esta última, un número máximo de tripulantes, y el cumplimiento de la ley provincial de pesca, un protocolo sanitario y de distanciamiento social.
Según datos aportados por el gobierno de la provincia de Santa Fe, existe una marcada disminución de la demanda de productos derivados de la pesca en este período de pandemia, en el mercado interno -tal es el caso de los restaurantes gastronómicos- y externo -como el cierre del mercado con Brasil y las restricciones comerciales con Bolivia y Colombia.
Es importante destacar además las resoluciones de las provincias de Misiones, Corrientes y Chaco que resolvieron habilitar o están pronto de hacerlo dentro de sus jurisdicciones la pesca deportiva, comercial y de subsistencia en los ríos Paraná, Iguazú, Uruguay y sus afluentes. Según dichas resoluciones los niveles de los hidrómetros han detectado una recuperación y les ha permitido como autoridades locales de aplicación de sus leyes tomar estas decisiones, siempre teniendo en cuenta la situación sanitaria de cada provincia.