La ciudad de Ushuaia, conocida como la puerta de acceso al Fin del Mundo, es uno de los destinos turísticos más atractivos de la Argentina. Es que la capital de Tierra del Fuego es un escenario perfecto para descansar en pareja o en familia, ya que posee paisajes dignos de un cuadro y ofrece una amplia variedad de actividades para realizar al aire libre, entre paseos, excursiones y degustaciones.
Ushuaia es mucho más que el color azul infinito de sus montañas, mar y cielo, porque desde que uno arriba puede notar que se respira un aire distinto al de cualquier parte del mundo. A lo largo del año, se recomienda visitar el Parque Nacional Tierra del Fuego, el Tren del Fin del Mundo, navegar por el Canal de Beagle o aventurarse en un circuito en 4x4 sobre los lagos Fragnano y Escondido. De todas maneras, las actividades más inolvidables conviene realizarlas en invierno, debido a que la nieve fueguina es una de las mejores del planeta.
Entre las excursiones invernales se destaca la navegación con Lobos, que es un recorrido por las islas de los Pájaros, de los Lobos y Kerelo, donde además se accede al Faro Les Eclaireus. Su precio ronda los $2.300 y se puede realizar en grupos de varias personas. También se aconseja el denominado “Momento Olum”, que consiste en un trineo con perros y motos de nieve aptos para niños y ancianos, que cuesta alrededor de $4.200. Para vivir un momento más íntimo, se puede contratar un servicio de fogata nocturno por un valor de $4.700.
El Parque Nacional Tierra del Fuego fue creado en 1960 para proteger la porción más austral de los bosques que se encuentran junto al Canal de Beagle. Cuenta con una superficie de 63.000 hectáreas y una vasta cantidad de montañas andinas, ríos, lagos originarios de glaciares y costas marinas.
Gracias a su abundante diversidad, aquí se puede hacer trekking, campings y avistaje de aves. El cóndor andino, con alas de hasta 3,3 metros de largo, y el zorro colorado son los animales más representativos de la región. También habitan la zona fringilos patagónicos, rayaditos, cotorras australes, pájaros carpinteros, zorzales, ratonas australes, colibríes, huillines y castores americanos. En cuanto a la fauna, la mayor parte se compone de bosque andino, magallánico y pre-antártico. Los árboles más visibles son la lenga, el ñirre, el coihue magallánico y el canelo.
Dentro del parque funciona el famoso Tren del Fin del Mundo, que es uno de los paseos turísticos más populares de la ciudad. Fue inaugurado en 1994 y su verdadero nombre es Ferrocarril Austral Fueguino. Recorre los últimos siete kilómetros del antiguo “tren de los presos”, que era un ferrocarril que llevaba mercancías desde y hasta el penal de Ushuaia, lugar que en la actualidad también es punto de interés.
El tren transita el Cañadón del Toro y atraviesa el río Pipo por el Puente Quemado. Luego, sigue su recorrido por las vistas panorámicas de la estación Cascada La Mararena, donde se detiene para que los pasajeros puedan bajar y contemplar el paisaje. Entre mayo y agosto, parte de la Estación Fin del Mundo en los horarios de las 10:00, 12:30 y 15:00 hs., mientras que en temporada alta –de septiembre a abril– sale a las 9:30, 12:00 y 15:00 hs. Los precios oscilan entre 47 y 106 dólares.
Se recomienda conocer el Canal de Beagle mediante las excursiones de tres horas de duración que brindan prestadores de servicios como Rumbo Sur, Tolkeyen, Canoero y Tres Marías. El viaje consiste en una navegación a través de colonias de lobos marinos y aves australes, por medio de la cual se accede al faro Les Eclaireus, con opciones de caminata en las Islas Bridges o la Isla “H”, y salidas hacia la pingüinera de Isla Martillo.
A pesar de que estas actividades son las populares, también se sugiere visitar la ciudad y probar las delicias que venden en las chocolaterías fueguinas. También se puede hacer shopping en los locales libres de impuestos que se ubican en la Avenida San Martín.
Para alojarse, una de las mejores alternativas es Las Hayas Resort, un establecimiento a solo siete kilómetros del centro, con spa, piscina, restaurant gourmet, actividades recreativas, juegos para niños y vista al bosque y el Canal de Beagle.
Otro lugar que merece ser visitado es el Almacén de Ramos Generales, donde se elaboran unos exquisitos croissants de almendras, ideales para el desayuno o la merienda.