La robótica y la ingeniería industrial se meten hasta la cocina para transformar la metodología de la comida rápida en una innovadora y saludable experiencia culinaria. Ese es el concepto de Spyce, uno de los restaurantes pioneros en utilizar robots para preparar y servir recetas diseñadas por un chef con tres estrellas Michelin –una forma de calificar a los restaurantes–, que ha despertado el interés de expertos en gastronomía.
Fue tal el alcance del restaurante ubicado en Boston, que fundado por ingenieros graduados del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y el chef Daniel Boulud, que el equipo recibió un financiamiento para expandir su plataforma robótica culinaria en la Costa Este de EE.UU.
De esta manera, los chefs Thomas Keller y Gavin Kaysen, con una reconocida trayectoria en la Unión Americana, así como Jérome Bocuse, presidente y juez del legendario Bocuse d’Or World Cuisine, se sumaron al proyecto.
Gavin Kaysen, propietario de Spoon and Stable en Mineápolis, explicó que el restaurante despertó su interés por su hospitalidad y enfoque: su uso de tecnología e ingeniería para ofrecer un producto consistente y confiable, con el objetivo de mejorar el servicio que se les brinda a los comensales.
Las recetas de Spyce están inspiradas en las especias, sabores y texturas más deliciosas de todo el mundo, y tienen como base 12 ingredientes que son cuidadosamente seleccionados por el chef Boulud. Los clientes pueden elegir los ingredientes y capturar la orden a través de un sistema de punto de venta. Las variedades son: vegetarianas, del mar, sin gluten y veganas. La cocina robotizada, que cuenta con un mecanismo de autolimpieza, mezcla los ingredientes y los sirve.
No obstante, la presentación de los alimentos es importante para Spyce. Por ese motivo, para garantizar ese aspecto, una persona se encarga exclusivamente de aplicar los toques finales a la preparación.
El rango de precio también es variado, partiendo de los US$7,5 por bowl. Según sus fundadores, el objetivo es contribuir a desarrollar mejores hábitos de alimentación, mejorar el servicio y reducir a cero el desperdicio de alimentos.