Una jornada nacional sobre legumbres

on el anuncio de la constitución de la mesa provincial de legumbres, la ministra de Producción de Santa Fe, Alicia Ciciliani, dio la apertura formal del evento. Entre otros temas, en esta ocasión se abordaron aspectos claves vinculados a la producción de legumbres como así también sobre el manejo, el mejoramiento, el agregado de valor y la comercialización de arvejas y lentejas.

De esa misma apertura participó Gabriel Prieto (INTA Arroyo Seco), que destacó la importancia de conformar una mesa de legumbres a nivel provincial. “El hecho de que esté presente la ministra en esta jornada y anuncie la posibilidad de armar una mesa de estas características es una muy buena noticia. En otros años ya se había avanzado en planificaciones de este tipo pero por diferentes motivos no llegaron a concretarse. Nuevamente surge la oportunidad de institucionalizar toda la cadena legumbrera de la provincia, en donde estemos presentes técnicos y representantes del Estado junto a grupos de productores, procesadores, acopiadores, exportadores y proveedores de insumos. Lo trascendental de esta noticia es que vamos a poder llevar nuestra voz a las reuniones de las mesas nacionales de legumbres”.

Panorama nacional e internacional del mercado de legumbres

Adrián Poletti (Incementar), planteó que la irrupción de Kazajstán como país productor de lentejas hizo que el cultivo esté, actualmente, en su piso histórico en cuanto a precio. “En 4 años, Kazajistán pasó de producir 0 a 800 000 toneladas de lentejas. Tiene un nivel de llegada a países consumidores como Turquía, Irán, La India que lo hace realmente competitivo. Antes, esos países debían contratar barcos para esperar esa mercadería que provenía de Canadá; ahora, esa misma lenteja y de similar calidad, la pueden recibir desde Kazajistán y en camiones. Ese poder de logística modificó radicalmente el mercado mundial” dijo Poletti.   

En cuanto a la arveja, destacó que el cultivo está iniciando camino hacia una diferenciación muy fuerte entre lo que es la arveja forrajera y la que es para consumo humano. Esto plantea grandes desafíos; en cuanto a la forrajera, “debemos obtener niveles de productividad y de proteínas de calidad porque va a ir atado, necesariamente, al valor de la proteína de soja. Esto le dará más previsibilidad al mercado ya que va a tener una referencia de precios respecto a dónde poder referenciarse”.

En cuanto a las arvejas para consumo humano, la clave estará enfocada en su calidad. Estos factores, aclara Poletti, plantean un desafío que es profesionalizar todo el sistema. Para ello, además de respetar la propiedad intelectual de la genética, “debemos aumentar la producción y la productividad de arveja verde para atender a nuestros mercados naturales como lo son Brasil, Latinoamérica y parte de África” enfatizó. A su vez, el especialista aseveró que en Chile se abre una gran oportunidad de negocios, debido a que en ese país “se proyecta para este año, una importación de arveja amarilla solo para el mercado de los salmones, de 400 000 toneladas. Hoy, ese mercado es atendido por Canadá y nosotros tenemos que encontrarle la vuelta para atenderlo”.  

Nueva variedad de arveja verde

Desde el año 2014, y a través de un convenio de cooperación técnica entre el INTA y la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), se está trabajando en el mejoramiento genético de arvejas y lentejas, para así lograr nuevos materiales que se adapten a la región. En este sentido, Andrea Espósito (INTA Oliveros) anunció que, en el marco de dicho convenio entre instituciones públicas, “se logró obtener la primera variedad de arveja verde que se llamará PRIMOGENITA FCA-INTA. Este material se ha desarrollado en la región, por lo que tiene una alta adaptabilidad a las condiciones climáticas del lugar”.

Espósito aseveró que una de las características de esta arveja verde es su capacidad de adaptabilidad, muy superior a cualquier otra variedad que esté en el mercado. La variedad de referencia que se tuvo en cuenta para realizar el comparativo es la más usada en la región y hace más de 20 años que está en el mercado. En base a esto, la especialista destacó que “en el peor de los casos, el material logrado rinde 40% más y en el mejor de los escenarios rinde hasta un 80% más. Esta arveja tiene un buen porte de planta, lo cual facilita su cosecha y presenta un buen comportamiento frente a enfermedades producidas por patógenos del suelo”.  

La campaña que viene y cómo nos preparamos para el verano

“Basándonos en los precios que algunos operadores están fijando para la cosecha, creemos que habrá un leve incremento para el cultivo de arveja, y en cuanto a lenteja se estima una producción similar o con una pequeña caída debido a la falta de semillas, ya que desde hace dos años se está perdiendo la producción por factores climáticos” estableció Gabriel Prieto.    

Fernando Salvagiotti (INTA Oliveros) habló sobre la inclusión de las leguminosas dentro de las rotaciones. “En invierno, cuando generalmente el terreno está descubierto, se recomienda sembrar un cultivo que beneficie a lo que se planifique sembrar en verano”.

En este caso, el especialista disertó sobre las leguminosas como buenas antecesoras de un maíz. “Las leguminosas hacen un buen aporte de nitrógeno. Las dos opciones que proponemos son: sembrar un cultivo de grano como la arveja en el cual una parte se irá como cultivo de grano y la otra quedará en el sistema; o la vicia, que es un cultivo que no se cosecha y se lo deja secar para que aporte nitrógeno al sistema y, al mismo tiempo, sirve como un buen controlador de malezas” estableció.  

Al trabajar la tierra de esta manera, “se verá beneficiado el cultivo siguiente, que en el caso que presentamos es el maíz tardío. Ese maíz tendrá un muy buen aporte de nitrógeno, y ese aporte estará directamente relacionado a la materia seca; cuanta más materia seca haya mayor será el efecto. Los maíces sembrados sobre vicias no necesitarán fertilización ya que el aporte de nitrógeno de esa materia seca será suficiente” destacó Salvagiotti.

Según estudios del INTA Oliveros, la fijación biológica de nitrógeno que puede aportar una vicia o una arveja es de un 60% aproximadamente. Para ello, es importante que las leguminosas que sean antecesoras de maíz estén bien inoculadas y fertilizadas para que puedan tener un buen crecimiento.       

INTA