Estancia Colomé: turismo rural en territorio salteño

Estancia Colomé es una lujosa estancia propiedad de la familia Hess, que desde 2001 funciona como hotel de lujo a solo 65 kilómetros de Cachi. La finca, que se ubica junto a Bodega Colomé –la más antigua de la Argentina–, fue construida en 1831 por el entonces gobernador de la provincia de Salta, Nicolás Severo de Isasmendi, quien se adentró en la industria de la vid gracias al impulso de su hija Ascensión y su yerno, José Benjamín Dávalos.

Previo a la adquisición de Donal Hess en 2001, la estancia se dedicó a la producción de uvas Malbec y Cabernet Sauvignon francesas. Actualmente, el casco principal –que es la casa donde viven sus dueños–, tiene un hotel con nueve amplias habitaciones con terraza y vista a un jardín de cactus con senderos que se funden en una bellísima piscina. Para que la propuesta sea aún más atractiva, hace unos años se inauguró un museo dedicado al artista estadounidense James Turrell, conocido popularmente como “el genio de la luz”.

Donald Hess pertenece a la cuarta generación de la Hess Family Wine Estates, que comenzó en Berna (Suiza) en 1844. Él y su mujer, Úrsula, siempre quisieron elaborar un terroir de altura y durante un viaje por los Valles Calchaquíes en 1998, quedaron fascinados con la belleza de Colomé. Hoy, a más de dos décadas de aquella visita, producen más de medio millón de litros anuales, exportan a 25 países y dejaron su huella personal en un pueblo homónimo con la construcción de un centro comunitario, una iglesia, varias viviendas y una importante mejora de infraestructura la principal escuela de la localidad.

La estadía en Estancia Colomé arranca con un exquisito desayuno con panes artesanales elaborados por Patricia “Pachi” Guantay. El recorrido sigue con una caminata o paseo guiado por el territorio, antes de parar en la bodega y realizar una degustación de los exclusivos vinos Colomé y Amalaya. El proyecto vitivinícola estuvo en manos durante una primera etapa por el enólogo francés Thibaut Delmotte y actualmente es administrado por su compatriota, Antoine Bonneau. El especialista, trabaja con cuatro fincas que le proveen uvas de distintas altitudes: Finca Colomé, a 2.300 metros sobre el nivel del mar (msnm), cuyos viñedos están alrededor de la bodega y la estancia; Altura Máxima, con viñas a 3.111 msnm; Finca El Arenal, a 2.700 msnm y Finca La Brava, a 1.750 msnm.

Desde su llegada a Salta, Bonneaud desarrolla prácticas agrológicas y biodinámicas que incluyen la fertilización del suelo a través de abonos orgánicos y la aplicación de antroposofía en el manejo agrícola según ciclos lunares, del sol y los planetas. A través del recorrido por los distintos puntos de la bodega, se puede aprender más sobre los métodos de elaboración del vino y algunas de las filosofías introducidas en Alemania por el austríaco Rudolf Steiner, padre de la biodinámica.

A la hora de comer, la cocina está a cargo de Guantay y José Antonio González, quienes crean diversos platos a partir de ingredientes locales con una vuelta de tuerca. El menú se cambia regularmente, aunque las preparaciones más recomendadas son el lechón al horno con cebollas agridulces y puré de papas; la sopa de remolacha o calabaza con crutones; la lasagna de verduras de estación gratinadas con queso parmesano y pesto de albahaca; y los helados de lavanda, cedrón y torrontés.

A eso de las 15 abre el museo en homenaje a James Turrell, al que se ingresa en horarios establecidos y en grupos reducidos. Es un espacio de 1.700 metros cuadrados repartido en nueve salas donde la luz hace que cada obra parezca única. Cabe destacar que Hess ama el arte y exhibe parte de su colección personal en la Hess Collection Winery del Valle de Napa (Estados Unidos) y en Bodegas Glen Carlou (Sudáfrica).

No es casualidad que Hess haya elegido la obra de Turrell, quien a través de su arte busca llevar al espectador hacia una contemplación silenciosa basada en la paciencia y la meditación. En este sentido, la finca posee una instalación denominada Skyspace, que se visita en días que no llueve e invita a los turistas a acostarse en el piso, sobre una manta, a la hora que arranca el atardecer dentro de un cuadrado diseñado en el techo abierto al cielo. La idea es admirar el apartado y observar cómo van cambiando los colores, que oscilan entre lilas, morados, anaranjados, rosas, celestes y azules.

Estancia Colomé está ubicada en la Ruta Provincial 53 sobre el kilómetro 20. Tiene tarifas desde 250 dólares por persona con desayuno incluido. El Museo Turrell está abierto de martes a domingos con visitas de 15 a 17 hs y ofrece salidas en grupos de hasta ocho personas. Está prohibido el ingreso de menores de doce años y tomar fotografías. Para más información, comunicarse al (03868) 494-200 o visitar www.bodegacolome.com.