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stas iniciativas incluso enumeran países individuales como posibles exportadores de hidrógeno, pero ninguna de las listas incluye a Rusia, que actualmente es el mayor proveedor de energía de carbono convencional a Europa.
Es evidente que Rusia aún no se ha centrado en los recursos energéticos renovables o la creación de energía de hidrógeno. El petróleo, el gas y el carbón siguen siendo sus recursos energéticos predominantes. Por otro lado, Rusia se comprometió a reducir sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) mediante la firma del Acuerdo Climático de París. El desarrollo de las energías renovables está en marcha, como ya hemos informado . Además, para el sector energético de Rusia, está quedando claro que Europa, con su objetivo de descarbonizar la economía para 2050, ya no será el principal consumidor de fuentes de energía convencionales. Si Rusia quiere seguir desempeñando su papel de proveedor de energía para Europa, debe reconocer y adaptarse a estas realidades.
En nuestro artículo sobre Rusia en la Guía de expertos de la CMS sobre la ley y la regulación del hidrógeno , describimos la situación actual en el sector de la energía del hidrógeno. Su principal conclusión fue que este sector carece de una regulación adecuada en Rusia. Sin embargo, después de la publicación de este artículo, Rusia adoptó y publicó el Plan de Acción “Desarrollo de la energía del hidrógeno en la Federación de Rusia hasta 2024” *, que se ha convertido en el primer documento oficial sobre el desarrollo de la energía del hidrógeno en Rusia.
Abarcando el período hasta 2024, el Plan es a corto plazo y su preparación y organización estarán a cargo del Ministerio de Energía, el Ministerio de Desarrollo Económico, el Ministerio de Industria y Comercio, la Universidad Minera de San Petersburgo y otras organizaciones especializadas. Estos organismos deberían crear las condiciones para la formación de un sector ruso de energía de hidrógeno dentro de un plazo establecido. En particular, el Plan prevé las siguientes actividades:
planificación estratégica;
incentivos y medidas de apoyo estatal;
formación de capacidades de producción;
implementación de proyectos piloto prioritarios;
desarrollo científico y técnico;
mejora del marco regulatorio; y
desarrollo de recursos humanos y cooperación internacional.
Las principales disposiciones del Plan se especificarán con más detalle más adelante.
En el marco del Plan, las principales acciones de planificación estratégica se implementarán durante el primer trimestre de 2021. Para entonces, el concepto del desarrollo de la energía del hidrógeno en Rusia debería estar redactado. También se establecerá una oficina de proyectos para implementar este concepto y un grupo de trabajo interinstitucional a nivel ministerial. Para fines de 2021, Rusia debería tener un sistema de monitoreo de generación de hidrógeno implementado.
A mediados de 2021, se deberían desarrollar medidas de apoyo estatal para las exportaciones de hidrógeno y la demanda interna de hidrógeno.
Los proyectos piloto deben identificarse de manera prioritaria para fines del primer trimestre de 2021 para formar capacidades de producción. El Plan ya prevé la participación de grandes empresas energéticas de propiedad pública (Rosatom, Gazprom) en estos proyectos. Otros participantes del mercado, como Rosneft y Rusnano, también han expresado interés. Los proyectos piloto deben implementarse en 2024.
Los proyectos especificados en el Plan incluyen:
el establecimiento de capacidades para la generación de hidrógeno “verde” (con energías renovables), “azul” (de gas natural con captura de CO2) y “amarillo” (con energía atómica);
desarrollar y fabricar turbinas de gas que funcionen con combustible de metano-hidrógeno;
creación de un modelo prototipo de transporte ferroviario impulsado por hidrógeno.
El apoyo a la investigación y la tecnología se centrará en el estudio de las tecnologías de producción, almacenamiento y transporte de hidrógeno. Los estudios cubrirán la prevención de las emisiones de gases de efecto invernadero en la producción de hidrógeno y el uso de energía nuclear para la producción de hidrógeno.
El marco regulatorio en este campo se creará mediante la actualización y el desarrollo de leyes, normas nacionales y reglamentos técnicos.
Curiosamente, el Plan tiene una sección separada dedicada al desarrollo de la cooperación internacional. Sobre todo, la sección prevé una cooperación bilateral a largo plazo con países productores y consumidores de hidrógeno.
Se deben preparar propuestas específicas para el desarrollo de la cooperación internacional antes del tercer trimestre de 2021. Se promoverán las tecnologías rusas de hidrógeno y de energía de hidrógeno en los mercados internacionales.
Teniendo en cuenta la máxima importancia del sector energético en Rusia y el hecho de que se espera que el comportamiento de sus principales consumidores de energía (p. Ej. Países europeos) cambie considerablemente, este Plan ha llegado a la undécima hora. Sin embargo, de la orientación del Plan se desprende claramente que Rusia se ve a sí misma como un productor de hidrógeno. Aunque el Plan considera el mercado interno ruso, su enfoque principal es el papel del país como exportador de hidrógeno. La voluntad de Rusia de producir y suministrar azul y amarillo y, a largo plazo, hidrógeno verde será un requisito previo esencial para acceder al mercado europeo.
Si el Plan se implementa según lo previsto, se podrían adoptar decisiones importantes ya en el primer trimestre de 2021, como la elaboración del concepto de desarrollo de la energía del hidrógeno en Rusia.
Por el momento, Rusia está dejando muy claro que planea continuar su papel como proveedor de energía para Europa en el futuro previsible.
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