eddy Cotella es productor Aapresid y miembro de la Chacra Aapresid Sachayoj. En la región Chaco-santiagueña trabaja campos propios y arrendados. El manejo histórico era maíz y soja en proporción de 50/50 con buenos rendimientos para la zona. “Hace algunos años vemos que un lote de soja de 40 qq/ha promedio tiene picos de 45 y pisos de 25 qq/ha”. Los ambientes de menor productividad vienen en muchos casos de larga historia agrícola y monocultivo.
La Región Chaco Santiagueña es una zona de temperaturas extremas, lluvias torrenciales y estacionales y campos en algunos casos con pendientes. Los ambientes son lábiles y quedan expuestos a procesos de compactación, estructuras laminares y problemas de infiltración. Empiezan a verse deficiencias de nutrientes como P o Zn que – que en la zona no son limitantes -, pérdida de MO, escorrentía, colonización de malezas resistentes y menor retención de agua útil.
En esos ambientes degradados, las rotaciones típicas no generan cobertura suficiente para la recuperación. “Fue ahí cuando entendimos que si no cambiábamos de estrategia, no sólo seguiríamos degradando los lotes menos productivos, sino que los mejores lotes seguirían el mismo camino”, explica Cotella.
Así empezaron a buscar el origen de la variabilidad y planificar acciones acordes. La información histórica de ambientación con NDVI en periodos críticos de los cultivos se valida cada año con lo que marca el monitor de rendimiento. Con esto delimitaron ambientes de alta, media y baja productividad.
En los ambientes más degradados, la generación de cobertura aérea y radicular fue la prioridad con el fin de recuperar de manera biológica la estructura física y la fertilidad química del suelo. Se optó por cultivo de servicios (CS) de centeno sembrado terrestre, alta densidad y acercando líneas. “En esta zona es un desafío porque hay poca disponibilidad de máquinas para esto. Lo que hicimos fue usar el disco del cajón fertilizador entre los cuerpos de la sembradora a 52. Si bien la distribución ‘a chorrillo’ no es lo óptimo, este surco extra es clave para generar una cobertura densa”, asegura.
Cotella elige centeno por su buen comportamiento en invierno, rusticidad, bajo requerimiento hídrico y sus raíces en cabellera que exploran en profundidad. La siembra terrestre da más garantías de implantación y cobertura, ya que la aérea no es tan versátil para altas densidades y necesita buena humedad de suelo y ambiente para permitir la germinación.
Mejores ambientes permiten CS como vicia pura o consociada con centeno o avena. Otra opción es el CS de garbanzo. “Su bajo costo – usamos semilla que se descarta por bajo calibre – y buenos aportes de biomasa y N hacen del garbanzo una opción interesante para la zona”, explica.
En otro plano se definieron ‘rindes objetivo’ por ambiente. “La idea es no quedarse con el promedio sino aspirar a que los ambientes de menor productividad lleguen al rinde de indiferencia. A veces son pocos quintales, pero fijarse un objetivo ayuda a no conformarse y ponerle cabeza al manejo”, dijo.
Para soja, por ejemplo, este objetivo se logró aumentando la densidad de plantas y con estrategias de fertilización variable. “En maíz estamos evaluando hasta qué punto nos conviene poner más plantas en ambientes de alta productividad – con mayor riesgo de vuelco por ejemplo –, o focalizar en el ajuste de la fertilización – especialmente nitrogenada – en áreas de mediana productividad, donde vemos mayor capacidad de mejora”, concluye Cotella.
Los suelos “Siempre vivos, siempre verdes” son el lema que atraviesa las temáticas del próximo Congreso Aapresid, completamente virtual.
La Agricultura Siempre Verde contará con disertaciones exclusivas y panelistas como el World Food Prize Rattan Lal; el geólogo David Montgomery; el especialista en suelos de la Universidad Iowa, Antonio Mallarino; referentes en CS como Steve Groff y Gervasio Piñeiro, entre otros.
Pero, además, la virtualidad ofrece una oportunidad única para “visitar” experiencias en ASV del país y del mundo. Habrá charlas sobre planteos verdes en NEA y NOA. Las 10 Chacras Aapresid se preparan para recibir visitantes. Chacras como Bandera, Sachayoj, Justiniano Posse y por supuesto, Pergamino – la pionera en planteos verdes – abren sus puertas para compartir los resultados de años de trabajo en temas como biología de suelos, brechas de rendimiento, entre otras.
Llegan testimonios de productores de distintas regiones del mundo para contar en primera persona sus experiencias en línea con la ASV.
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