l mercado argentino de agromáquinas vivió en los últimos dos años una proliferación de la oferta de tractores de baja potencia, que impulsó la radicación de emprendimientos industriales en Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires.
Aptos especialmente para el trabajo frutihortícola, para las labores en la producción de los cinturones verdes ciudadanos y al interior mismo de las ciudades, en plazas y espacios verdes, revelaron la emergencia de un nuevo nicho de negocios en fuerte auge y que era inexistente hasta hace muy poco tiempo.
“De hecho, es parte de una corriente, una tendencia general de los mercados de máquinas autopropulsadas (y esto vale para autos, utilitarios, etcétera) la búsqueda de nuevas versiones más ágiles, eficientes, ecológicas y de bajo consumo de combustible, por parte del público”, señala un consultor industrial, explicando en parte el fenómeno.
Lo cierto es que configuran una nueva oferta que al parecer sintonizó con la necesidad latente que había de equipos, para trabajar centralmente espacios verdes.
Una demanda que se concentra en los mantenimientos de countries, campos para diferentes disciplinas deportivas, cementerios-parque e, incluso, estancias, entre otros espacios.
En el caso específico de las estancias, no sólo hay demanda, por ejemplo, de establecimientos en la provincia para mantener parques y jardines: “También se están utilizando tractores en las grandes estancias de la Patagonia”, señalan operadores de este mercado ante la consulta de la prensa especializada.
Los requerimientos por tractores de baja potencia llegan también desde comunas y municipios que los emplean en los movimientos de equipos destinados a obras públicas.
Incluso, el surgimiento de la nueva generación de tractores fue acompañado por una línea de implementos específicos para trabajos en economías regionales y para tareas en espacios públicos, lo cual apuntala toda una nueva oferta de productos para las empresas del sector.
“Por ejemplo, hay un segmento de desmalezadoras que ofrece un amplio espectro de prestaciones en la conservación de extensas superficies con césped, incluyendo banquinas”, informa la Cámara Argentina Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma) que agrupa a las empresas productoras de agromáquinas.
En ese marco y ante la identificación de que son pocos los jugadores nacionales que ofrecen estos productos, se sumó el año pasado en Córdoba la empresa Mojón Uno SA. Fue antes de la sequía de este año, con motivo de la apertura de la 85ª Exposición, Agropecuaria, Industrial y Comercial de San Francisco, cuando se presentó la puesta en marcha de la planta de montaje de tractores de baja potencia marca Kubota.
La iniciativa de la firma sanfrancisqueña fue ofrecer soluciones a las economías regionales y el sector público, en particular con una gama de tractores que van desde los 23 HP de potencia hasta los 85 HP y que se utilizan en espacios verdes urbanos y semiurbanos, labranzas de poca extensión y en la producción frutihortícola principalmente, según informó a la prensa Matías Boll, director Comercial de Mojón Uno.
Sin embargo, Micrón Fresar no es la única compañía cordobesa que apostó al segmento de los tractores de potencia baja y mediana. Desde Las Varillas, de hecho, Pauny ya lo viene trabajando. Y desde su planta de Oncativo la empresa cordobesa de soluciones en higiene urbana Econovo cerró una alianza con la multinacional Escort que le permitió ofrecer tractores pequeños y medianos marca Farmtrac.
Oscar Scorza, CEO de la compañía, quien acaba de finalizar una gira comercial por Oriente con el fin de incorporar nuevas tecnologías en el campo de la maquinaria vial y la agrícola, confirmó a Comercio y Justicia la puesta en marcha del convenio de representación exclusiva en toda la región y la nueva marcha de la empresa en el mercado de tractores.
La compañía japonesa, representada en Argentina por Mojón Uno, con planta en San Francisco, dispone de cuatro versiones de tractores, ubicadas entre 23 y 85 HP y complementadas con implementos de Yomel, Zeppelin y Land Pride. La firma del este cordobés cuenta con el respaldo de Micrón Fresar, representante oficial y exclusivo de los tractores japoneses Kubota en Argentina.
Reforzó su posicionamiento en el segmento de los minitractores con el lanzamiento del modelo H025 (25 HP), “un modelo de amplia compatibilidad con los implementos que también fabrica Roland H. Posteriormente sumó la versión H050 (50 HP) que también se aplica en el mantenimiento de espacios verdes”, señalan.
En 2017 Hanomag sumó a sus líneas de tractores las versiones de bajo costo de la Línea Stark, especialmente desarrollada para trabajos en espacios verdes, tareas de mantenimientos y pequeñas explotaciones.
Goldoni en alianza con Siembra Neumática, propone modelos que parte de 22 HP y están especialmente acondicionados para trabajos en parques.
La empresa de Las Varillas desarrolló el tractor articulado Bemfra TH-50, un equipo multifunción, con motor de 50 HP y transmisión hidráulica. Opera con un chasis articulado que permite un ángulo de giro de hasta 35º y dispositivos para acoplar herramientas de desmalezado y poda, entre otras tareas. Se trata del primer tractor articulado de fabricación nacional destinado a pequeñas explotaciones de agricultura familiar.
Villa, la fábrica que históricamente tuvo su fuerte en la producción de motores, incorporó una línea de tractores de baja potencia de origen chino. Son máquinas de 20 a 25 HP, ideales para trabajar con desmalezadoras (otra novedad de la empresa) en espacios verdes. Los más vendidos en esta marca son tractores cortacésped de 16 HP: Apache. La compañía de Las Parejas (Santa Fe), en acuerdo con la empresa india Sonalika, comercializa tractores de la línea Solís. Propone versiones que arrancan en los 26 HP y que, además de las economías regionales, se utilizan para mantener espacios verdes. Chery la marca global china, que opera en Argentina por medio de American Agro con tractores de baja potencia, presentó una gama que parte de los 30 HP y es apta para la conservación de áreas verdes.
El negocio de los tractores en Argentina completó el año pasado como uno de los mejores años de la década. El mercado nacional demandó un volumen cercano a 8.000 unidades comercializadas, superando en 20% el nivel de 6.675 tractores vendidos durante 2016. Más allá de este contexto general, uno de los datos llamativos del rubro fue la “explosión” de oferta en el rango de baja potencia, que actualmente reúne una oferta disponible de más de 120 modelos de 18 marcas diferentes.
“De hecho, en el último año se presentaron más de 50 modelos de tractores de hasta 100 HP, con un dato singular: buena parte de los nuevos jugadores que se incorporaron al mercado lo hizo en el marco de alianzas estratégicas entre firmas locales con socios internacionales especialistas en el rubro”, señala la prensa especializada.
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