la hora de buscar los ¿por qué? surgen dos elementos, para la industria frigorífica el tema pasa por el alto volumen que tuvo la exportación de ganado en pie en años anteriores, para los productores pasa el comportamiento climático y su impacto en la producción de forraje.
Este y otros asuntos fueron analizados por el consultor privado, Bernardo Mendiola. El asesor de empresas ganaderas advirtió algunos cambios relevantes en el negocio ganadero, como que la recría generó mayor atractivo para productores que anteriormente se dedicaban a la invernada.
Mendiola dijo que la situación climática está incidiendo en el nivel de faena, pero también señaló que se percibe que muchos sistemas pastoriles pasaron del engorde a la recría. “El producto final dejó de ser un novillo gordo, que salía ahora en la post zafra y pasó a ser un novillo para colocar en los corrales de engorde. Ese cambio puede estar incidiendo en la oferta de ganado que habitualmente sale en esta época para faena”.
Eso sucedió, dijo, en función de las relaciones de precios más favorables para la recría de bovinos a la hora de vender un animal del 350 – 400 kilos. Además, se suma la eficiencia biológica de la recia que implica menos costos. “Esto hace unos años no se daba porque las relaciones de precios eran otras y por eso hoy, muchos productores se volcaron y se están volcando a negocios de recría y no tanto de engorde”.
El negocio del corral ha crecido lo que generó una demanda de animales de 350 a 400 kilos para encerrar, sumado a la cuota 481, destacó. Enfatizó que hoy hay demanda de novillos para encerrar y para ese cupo. Los precios de los novillos con esos pesos varían entre US$ 1,82 a US$ 1,85 por kilo y fuera de cuota unos 10 centavos menos, dijo.
Como siempre ocurre entre los actores del sector que están atentos al comportamiento del clima y su incidencia en la producción pecuaria, Mendiola repasó el impacto que tuvo la falta de lluvias en el verano y en el otoño, ya que en varias zonas hubo déficit hídrico, lo que actualmente se nota en el desarrollo de los verdeos y pasturas. “Eso ha motivado un atraso en las diferentes categorías terminadas a pasto, como la recría y la invernada”.
Los precios de algunas categorías, como el novillo gordo y novillo de recría para corral, bajaron entre 15% y 20% respecto al año pasado, “eso impacta en los resultados”. Pero en el caso del ternero la disminución no fue tan marcada, señaló.
Revista Verde