Desde el inicio de la cuarentena, allá lejos por mediados de marzo, el consumo de huevos se viene disparando porque la gente lo demanda más, para cocinar dentro de su casa. Los productores de ese alimento, nucleados en la Cámara Argentina de Productores Avícolas (CAPIA), calcularon esa mayor demanda en el 40 por ciento. De todos modos, este sector no justificó el fuerte aumento de los precios que se viene registrando en el mercado doméstico.
CAPIA, en un comunicado, avisó que “se está trabajando con las autoridades nacionales para encontrar una solución a la compleja problemática del abastecimiento y el precio del huevo”. Por lo pronto, denunció que no son los productores los que están aprovechándose de la situación. “Los únicos beneficiarios de los incrementos registrados en los puntos de venta son quienes integran la cadena de comercialización, que operan como los verdaderos formadores de precios”, se afirmó.
Los datos concretos que expone el comunicado de los avícolas:
- La demanda de huevos a nivel nacional se incrementó en un promedio del 40 por ciento desde el inicio de la cuarentena.
- Pese a esa mayor demanda, desde octubre 2019 el productor no aumenta su valor de venta.
- Desde marzo de 2020 el precio de venta del cajón de 30 docenas a granel, tamaño grande, sin clasificar, es de 1.500 pesos, y clasificado con envase primario y secundario es de 2.160 pesos, o sea 180 por maple.
- En cambio, sí enfrenta un incremento de costos promedio de entre 15 por ciento y 20 por ciento. Este incremento se desagrega en los rubros: materia prima y alimento balanceado (7 por ciento), insumos y envases (18 por ciento), logística (12 por ciento) y mano de obra (40,2 por ciento acumulado en los últimos tres meses).
- El productor obtiene una rentabilidad de entre 8 y 10 pesos por maple, cuando el comercio minorista lo vende entre 250 a 330 pesos, alcanzando ganancias que superan entre tres y cuatro lo que paga al productor.
- Para el canal supermercado, los productores tienen un costo de entre 85 y 90 pesos por docena, y “la venden a pérdida” (debido a los precios congelagos desde octubre de 2019) a 75 pesos. Luego el consumidor paga 120 pesos la docena, dejando un margen al supermercado del 66 por ciento “por un producto que vende y cobra en 24 horas y lo paga a 60 días”.
- “El productor no es el formador del precio al que se vende el huevo al consumidor en los 50 mil comercios alimenticios del país. Por el contrario, hoy el productor afronta el desafío de sostener el abastecimiento al 100 por ciento, con una demanda que creció en un 40 por ciento, con costos al alza, menos animales y la baja productividad de los actuales lotes”, dijo el presidente de CAPIA, Javier Prida.
Análisis Digital