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a Argentina tiene un gran potencial para incrementar la producción de legumbres, especialmente de poroto negro. A nivel internacional, éste se produce mayoritariamente en México y Brasil. Sin embargo, en ambos países, la demanda interna es mayor al volumen de producción, por lo que necesitan importar entre 80.000 y 120.000 toneladas anuales cada uno.
El incremento de la demanda de poroto negro a nivel mundial se explica, en gran parte, por una tendencia cada vez mayor a reemplazar proteínas de origen animal y más caras –como las de las carnes rojas– por vegetales.
Asimismo, en “Conversaciones con Expertos”, un ciclo de conferencias organizado por la Confederación Global de las Legumbres, los expertos remarcaron que otro aspecto que influye en el aumento del consumo es la emigración de venezolanos hacia otros países de América Latina. Además, la demanda también crece en Europa, sobre todo en Italia y España.
En este contexto, gracias a su estructura exportadora y a la disponibilidad de hectáreas para incorporar a la producción, la Argentina es el país con mayor potencial para aprovechar esa demanda insatisfecha.
Actualmente, la Argentina envía al exterior alrededor de 150.000 toneladas anuales de poroto negro. Si bien el principal destino de esas exportaciones es Brasil, también parten embarques rumbo a México, Venezuela, Europa y otros países de Latinoamérica.
China exportaba entre 40.000 y 50.000 toneladas a Cuba y otros países centroamericanos, y entre 30.000 y 40.000 toneladas a Venezuela –cifra que disminuyó en el último tiempo debido a la caída del consumo de alimentos en general en ese país–. Si la Argentina logra captar parte de ese mercado, podría incrementar sus exportaciones de poroto en hasta un 50%.
Según los especialistas, los principales desafíos son: lograr el desarrollo de nuevas áreas productivas; conseguir similares tratamientos impositivos en los países de destino que otros orígenes competidores; y alcanzar un acuerdo que garantice la fluidez de cobro en aquellos países que presentan condiciones específicas de comercialización.